El Clan del Golfo ha llegado a intimidar a los habitantes con quemando buses, carros, repartiendo panfletos y pintando paredes. Un comerciante fue asesinado.
La tensa situación de orden público en el norte del país afecta a por los menos cuatro departamentos, donde el Clan del Golfo ha llegado a intimidar quemando buses, carros, repartiendo panfletos y pintando paredes.
En el Bajo Cauca en Antioquia los colegios suspendieron clases, como es el caso del municipio de Zaragoza, donde por amenazas a la población cerraron las instituciones educativas y hay afectación en el transporte público.
En Sucre es complicada la situación en San Onofre, porque nadie quiere abrir su negocio y nadie quiere hablar. Todo porque llegó un panfleto del Bloque Aristides Meza, de las autodefensas Gaitanistas, advirtiendo que no responderán si alguien no acata la orden de paro.
En Córdoba hay parálisis en los municipios de Tierra Alta, Ayapel y Montelibano, allí amanecieron casas pintadas con grafitis que dicen Bloque AGC Roberto Vargas.
En ese mismo departamento, en el municipio de Cereté, fue asesinado a un comerciante. Hombres armados llegaron hasta el mercado público, sacaron a todos los vendedores, les ordenaron que cerraran sus negocios y al parecer uno de los comerciantes se negó, razón por la que lo mataron, según testigos del hecho.
En Montería fue convocado un Consejo de Seguridad por el gobernador de Córdoba, Orlando Benítez.
En el sur de Bolívar, hay tensión en por la aparición de panfletos en San Pablo y Montecristo, donde advierten que no se pueden abrir negocios y todo el mundo debe esta “quietico en su casa” o se atienen a las consecuencias.
En Antioquia se reportan problemas desde la noche del miércoles por cuenta una tractomula que fue abandonada por un grupo ilegal en el corregimiento Puerto Valdivia, bloqueando la vía entre Medellín y la costa Caribe.
Y si bien ese paso se logró restablecer en la mañana del jueves, horas más tarde se presentó otra situación en la misma carretera pero entre Cáceres y Caucasia, sector Guarumo, donde fueron incinerados varios vehículos.
Esto se suma a los grafittis alusivos a las AGC que han aparecido en casas y negocios de municipios como El Bagre, Nechí y el mismo corregimiento de Puerto Valdivia.