Durante el fin de semana el embalse de Guatapé sirvió como epicentro de la reactivación de los deportes náuticos. Pilotos de botes de velocidad de todo el país se dieron cita en las aguas del oriente antioqueño.
Desde temprano los pilotos ajustaron detalles de sus máquinas, un breve congresillo técnico y todos al agua. La expectativa estaba en este bote rojo, el más rápido para muchos y el rival que todos quieren vencer.
El bote rojo de Fernando Díaz sin duda fue el más rápido.
Le puede interesar Más de 100 congresistas dicen no al fracking
En medio de la carrera el bote negro quiso dar la pelea. Se trataba del padre de Fernando Díaz quien comparte con su hijo, el nombre, la pasión por la velocidad y el show náutico a todo motor.
Una carrera de padre e hijo. Esta vez quien celebro fue Fernando Díaz junior.
Con esta válida la idea es activar los deportes náuticos a motor que en escenarios como Guatapé garantizan un espectáculo y una competencia que se puede vivir a toda velocidad en familia.