El tribunal de justicia y paz de Barranquilla no permitió que el exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, que fue deportado de EE. UU., volviera a las calles.
El tribunal de justicia y paz de Barranquilla negó la libertad de Salvatore Mancuso, designado como gestor de paz por el gobierno de Gustavo Petro. El exjefe paramilitar volvió a Colombia tras cumplir su condena en Estados Unidos.
El magistrado explicó en su decisión que el exparamilitar actualmente no hace parte de ningún grupo armado ilegal y que por esta razón no podía ser liberado. Además, indicó que tampoco resultaba coherente decir que tenía supremacía en alguna banda y que, de ser así, debería iniciarse un trámite de incumplimiento en su contra por el compromiso de no volver a delinquir.
Así mismo, expresó que no se hace compatible la resolución con la que se pretende otorgarle el papel de gestor de paz a Salvatore Mancuso.
El magistrado subrayó que en caso de que Salvatore Mancuso asumiera el papel de gestor de paz, deberá ejercerlo desde su centro de reclusión, que en este momento es la cárcel La Picota en Bogotá. No obstante, destacó que ese rol tiene que realizarse de manera presencial, por lo que se haría imposible su trabajo de manera eficaz.
Sobre la decisión procede la apelación del exjefe paramilitar o del gobierno del presidente Gustavo Petro, el mismo que lo nombró gestor de paz.
¿Qué crímenes se le atribuyen a Salvatore Mancuso en Colombia?
Junto a los hermanos Carlos y Vicente Castaño creó grupos paramilitares como las Autodefensas Unidas de Colombia o las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU).
Salvatore Mancuso también contribuyó en la formación de las Convivir en 1994, según la Comisión de la Verdad. En estos grupos se avaló el uso de armas por parte de civiles, argumentando legítima defensa, apoyo a la seguridad y defensa nacional, además de la articulación con la fuerza pública.
En 2005, cuando se adelantaba el proceso de desmovilización de paramilitares, Mancuso dio a conocer su participación en la parapolítica.
En 2006 fue recluido en una cárcel y, en medio del proceso, el Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Descongestión lo condenó el 18 de octubre de 2007 a una pena de 40 años de cárcel como coautor de varios delitos. Sin embargo, tiempo después y gracias a los beneficios de la ley de Justicia y Paz, su condena quedó en 8 años.
En mayo de 2008, durante el gobierno del entonces presidente Álvaro Uribe, Salvatore Mancuso y otros cabecillas de las autodefensas fueron extraditados a Estados Unidos, que los requería por narcotráfico.
En Estados Unidos y durante 2015, Salvatore Mancuso fue condenado a 15 años y 10 meses de prisión por narcotráfico, pero en marzo de 2020 el juez que lo sentenció le convalidó los dos años que estuvo preso en Colombia y los que estuvo en el país norteamericano esperando el juicio.
En julio de 2023, el presidente Gustavo Petro le concedió el rol de gestor de paz y, el 27 de febrero de 2024, llegó a Colombia, deportado de Estados Unidos, y fue recluido en la cárcel La Picota de Bogotá
En Colombia, Salvatore Mancuso es señalado de más de 4.000 crímenes relacionados con desplazamiento forzado, homicidios y violencia de género, entre otros.