Érika de Souza aseguró que no es mala persona. Sus abogados afirmaron que ella tiene problemas de salud mental.
Sandra SegoviaEl pasado 16 de abril se conoció un caso insólito sobre una mujer identificada como Érika de Souza Vieira Nunes, de 42 años y quien llevó un cadáver a un banco ubicado en la localidad de Bangú, en Río de Janeiro, Brasil, para solicitar un préstamo por 17.000 reales (12 millones de pesos aproximadamente).
Fue un video que en cuestión de segundos se viralizó en las redes sociales, donde mostraba a Érika trasladando a su tío, Paulo Roberto Braga, de 68 años, en silla de ruedas, sosteniendo su cabeza y hablándole para disimular.
En Contexto: Video | ¡Insólito! Una mujer llevó un cadáver al banco para intentar cobrar un préstamo en Brasil
“Tío tienes que firmar. El señor tiene que firmar. Yo no puedo firmar por el señor. El señor tiene que agarrar el bolígrafo con fuerza y firmar aquí”, decía Vieira.
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El personal del banco no creía lo que estaban viendo, por lo que de inmediato llamaron a las autoridades para detener a la mujer y ser llevada a la estación de policía.
En Brasil una mujer llegó al banco con el cadáver de su tío para pedir un préstamo
Se determinó que tenía dos horas de fallecidohttps://t.co/Qzp4p3be7u pic.twitter.com/UJe2ReLk2B
— BI NOTICIAS (@BI_Noticias) April 17, 2024
Debido a esto, el Ministerio Público del país acusó a Erika de Souza Vieira Nunes de actuar de manera consciente y voluntaria, ya que mostraba un “desprecio y falta de respeto hacia su tío”, quien evidentemente estaba muerto.
Días después, la jueza Luciana Mocco, titular del 2º Juzgado Penal de Bangu, revocó su prisión preventiva debido a que los abogados de la señalada dijeron que ella tenía “mala salud mental” y es ama de casa, además, estaba a cargo de una menor discapacitada que requiere cuidados en casa.
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En una entrevista con TV Globo, Érika confesó lo que realmente sucedió, aludiendo que no se había dado cuenta que su tío estaba muerto.
“No me di cuenta de que mi tío estaba muerto. Es absurdo lo que dice la gente. No soy esa persona de la que habla la gente, no soy un monstruo”, dijo Érika de Souza para el medio.
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Érika había asegurado también que cuando su tío vivía, estaba en proceso de realizar aquel préstamo para hacer reformas en la casa, por lo que consideró necesario el dinero y llevarlo (aunque estuviera muerto) al banco para que firmara.