Don Elkin, un curtido agricultor afirma que, si no hay políticas urgentes para proteger el campo, habrá dificultades para dar comida a los colombianos.
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Los agricultores de Colombia estamos atravesando una época muy difícil, muy dura, pues los insumos están carísimos, pero cuando uno va a vender los productos, nos compran muy barato; lo dice Elkin de Jesús Giraldo, un cultivador maíz, fríjol, arveja y una amplia variedad de hortalizas, en zona rural del municipio de Marinilla, en el oriente de Antioquia.
Don Elkin, con azadón y machete en mano, recibió en su finca ubicada a 5 kilómetros del casco urbano de Marinilla, al enviado de Al Campo, de Caracol Radio y enseñó los cultivos de su parcela, que por estos días están afectados por una fuerte sequía iniciada desde comienzos de este año 2023.
Allí tiene pequeños cultivos de fríjol, arveja, coliflor y otros productos, y alista una porción de su terreno para nuevas siembras. Sin embargo, nos muestra con preocupación que los suelos están muy secos, lo que le ha impedido sembrar. “Así la tierra no da nada, sin agua lo que siembre se pierde”, asegura.
Y sin dudarlo, hace una preocupante reflexión: La agricultura se está acabando porque los jóvenes se van del campo. Ellos ven que sus padres y abuelos trabajaron mucho y consiguieron poco, entonces consideran que seguir en el campo no es buena opción.
Y reitera que los costos de producción se han elevado bastante desde el pasado año 2022. “Cuando uno va a vender le reciben todo, pero muy barato. En la ciudad nos dicen que nos reciben las cosechas por colaborarnos; qué tristeza”, se lamenta el señor Elkin de Jesús Giraldo, quien insiste en su llamado al Gobierno para que brinde apoyo al campo, ayuden a regular los precios, para que los campesinos reciban una paga justa. Escuche la entrevista completa de Al Campo, de Caracol Radio, en el archivo de audio anexo:
