El gobernador de Magdalena, Carlos Caicedo, consideró que la pandemia ha generado un efecto colateral positivo en cuanto a la restauración del sistema natural en ecosistemas afectados por la acción del hombre en las playas de la bahía de Santa Marta y los Parques Naturales de Tayrona, Sierra Nevada y en el Saltuario de Flora y Fauna de Ciénaga Grande.
«En las playas de Santa Marta, de Bello Sol, Bello Horizonte, del Rodadero y Taganga, ha vuelto el color azul cristalino de las aguas del mar y las arenas han vuelto a ser pardas y blancas, porque han descansado del hombre», describió el gobernador Caicedo, agregó que «además han vuelto una serie de aves y hasta delfines», evidenciando la recuperación de la naturaleza.
El gobernador de Magdalena, Carlos Caicedo, dijo que debemos reflexionar sobre el daño que le hemos hecho a nuestros ecosistemas y la biodiversidad. Consideró que esta crisis ha sido «dolorosa para el hombre, pero positiva para la biodiversidad»
«La naturaleza está hablando, está viva, y nos dice cuánto daño le hemos hecho», aseveró el gobernador Caicedo al llamar la atención por ejemplo de los responsables de las quemas de en zonas de la Sierra Nevada destruyendo el bosque primario, cuando debemos buscar una coexistencia sostenible, porque cuidar el patrimonio natural es garantía de calidad del aire y del agua para la vida humana.
El gobernador Carlos Caicedo afirmó «que los humanos no somos los dueños del planeta, somos inquilinos, y como tal tenemos que entender que debemos usar lo necesario y no depredar». Destacó la importancia del ejemplo y la tradición de los cuatro pueblos indígenas de la Sierra Nevada sobre un «enfoque sostenible» para la convivencia.
La cuarentena para enfrentar el COVID-19 tiene que dejar lecciones para el mejoramiento de las políticas públicas de conservación y sostenibilidad, por ejemplo los límites en la capacidad de carga y los horarios para las playas y los parques naturales, advirtió el gobernador de Magdalena, Carlos Caicedo, en Planeta Caracol.