El británico sufrió un paro cardíaco en febrero de 2013. También permaneció en coma inducido durante un mes.
Si hay algo o no después de la muerte, es un cuestionamiento que, pese a tener acercamientos (aunque opuestos) desde la religión y la ciencia, no se tiene una conclusión unánime. Para la segunda, un plano más allá del terrenal es prácticamente ‘inconcebible’ e intenta justificarlo en leyes de la física, mientras que desde la espiritualidad hay otra respuesta.
Entre quienes han dedicado su vida a la investigación todo tiene una explicación conectada a hechos, es decir, cuando el cuerpo cesa sus funciones, termina cualquier sentido de la consciencia. Sin embargo, el debate continúa entre aquellos aferrados a la creencia de que sí hay un plano, aun cuando el corazón no lata más.
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Uno de los escépticos es el académico estadounidense, Sean Carroll, para quien “no hay manera, en esas leyes, de permitir que la información almacenada en el cerebro persista después de que muera”, reseñó El Confidencial. Para el físico, si hubiese otro ‘mundo’ “el campo cuántico habría revelado partículas y fuerzas espirituales”.
Reveló qué vio tras morir siete minutos
Lo que sitúa la inquietud o choques entre ciencia y religión son los relatos de quienes aseguran haber tenido experiencias cercanas a la muerte. En ciertos casos basta con unos pocos minutos para ‘suscitar’ una serie de relatos sin aparente explicación y otros que, incluso, pueden llegar (según sus protagonistas) a los cuarenta minutos.
Siete minutos fueron los que un actor británico afirmó haber muerto y ‘visitado’ el cielo, luego de sufrir un ataque cardíaco en febrero de 2013. Su nombre es Shiv Grewal cuya familia, al cabo de un almuerzo, terminó viviendo una ‘pesadilla’ cuando creyó haber perdido a su ser querido.
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Aunque los hechos ocurrieron hace una década, recientemente volvieron a tomar interés, en el marco de una exposición enfocada en la experiencia que lo marcó. Este hombre, apasionado por el teatro, aseguró recordar cómo los paramédicos intentaban reanimarlo, aunque el paro le condujo a estar técnicamente muerto por siete minutos.
“Mi cerebro estaba muriendo”
Antes de que los médicos lograran ‘revivirlo’, Grewal afirmó haber visitado el cielo e, incluso, estar frente a varias posibilidades en el “más allá”. Por ejemplo, según contó a PA, reseñado por New York Post, entre las alternativas estaba la reencarnación, “varias vidas”.
“Sabía, de alguna manera, que estaba muerto. Era consciente de que mi cerebro estaba muriendo y gritaba pidiendo ayuda, pero al mismo tiempo sentía cosas completamente separadas de mi cuerpo”, confesó este hombre. Para él, lo percibido “era como si estuviera en el vacío, pero podía sentir emociones y sensaciones”.
El británico comparó lo que sintió aquel 2013 con estar nadando, pero en medio de una desconexión total del mundo físico. También aseguró ver “meteoritos y todo el espacio”, mientras se encontraba “viajando sobre la luna”.
¿Qué pasó después?
Frente a la serie de opciones que supuestamente tuvo, Grewal dijo que fue enfático en desear regresar con su familia, pues aún no se sentía preparado para partir. De acuerdo con New York Post, fue necesario que le colocaran un elemento para abrir sus arterias y estuvo en coma inducido por al menos un mes.
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Esa vivencia no quedó plasmada solo en el recuerdo, pues le dejó secuelas en la movilidad y habla, por lo cual se alejó de los escenarios. “Estoy agradecido de estar aquí. Mi impulso por la vida se ha visto impulsado”, dijo el inglés, en lo recopilado por The Mirror.
Para Grewal, su experiencia le ha dejado entre una sensación de temor y confianza sobre despedirse. “Por eso tengo menos miedo a la muerte, pero al mismo tiempo también tengo más miedo, porque me he dado cuenta de lo valioso que es todo lo que tengo en la vida”, aseguró.