GUATEMALA:
El agente de la Policía Nacional Civil (PNC) Isidoro Oswaldo López Hernández, de 36 años, recibió honras fúnebres este martes 10 de septiembre en el Complejo Deportivo de la zona 2 de Palestina de Los Altos, Quetzaltenango, luego de haber sido víctima de un ataque armado el pasado lunes 9 de septiembre en Colomba Costa Cuca, Quetzaltenango.
En la actividad participaron los jefes y miembros de las comisarías 41, 42 y 44, quienes rindieron homenaje a su compañero, quien sirvió a la institución policial durante 11 años, 6 meses y 23 días.
En las honras, también estuvieron presentes representantes de los 52 caseríos del municipio y el alcalde Genaro Méndez.
BUSCAN QUE SE HAGA JUSTICIA
El director de la PNC, David Custodio Boteo, informó que la institución «no descansará» hasta que se haga justicia, y que desde ya se inician las investigaciones para dar con los responsables del ataque.
«Se investigará cada detalle, cada pista y no se escatimará esfuerzos en la búsqueda para asegurar que los responsables de este acto cobarde enfrente todo el peso de la ley», afirmó Boteo.
El agente López dejó en orfandad a tres niñas, de 12 y 8 años, y una bebé de 9 meses. Fue parte de la comisaría de Huehuetenango y Quetzaltenango, y hasta el día que su muerte, formó parte de la subestación 41-54 de la comunidad agraria Mercedes, en Colomba Costa Cuca, donde fue asesinado.
EL ATAQUE
El incidente se produjo en el sector La Presa de la comunidad agraria, Las Mercedes, en Colomba Costa Cuca, cuando los policías se encontraban patrullando en el lugar.
De acuerdo con el reporte, los agentes se percataron de un intento de robo de una «caja rural», y al intervenir fueron atacados por los presuntos asaltantes.
Según detalló el director de la PNC, David Custodio Boteo, los policías de la Unidad se conducían en la patrulla Que-176.