POR DANIELA JIMÉNEZ GONZÁLEZ
Suponga que usted es un paciente que reside en el municipio de Venecia, en el Suroeste, afiliado a la Nueva EPS.
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Su diagnóstico es positivo para covid-19 y requiere de una cama en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Contrario al procedimiento tradicional, ahora la elección del centro hospitalario al que será trasladado no dependerá de su aseguradora sino de la Gobernación de Antioquia.
Ayer, Luis Fernando Suárez, gobernador (e), declaró la alerta naranja para el departamento, luego de tres días consecutivos con una ocupación por encima de 55 % en las UCI. Al cierre de esta edición, el porcentaje de ocupación estaba en el 66 %.
El primer paso que se da tras la declaratoria de este tipo de alerta es que será el Centro de Regulador de Urgencias y Emergencias (Crue), el que asumirá el control de las camas UCI y UCE (cuidados especiales) en el departamento. Cada caso en el que se necesite un espacio de este tipo, deberá pasar por el Crue, donde se definirá en qué institución hospitalaria debe ser atendido. Antes, la administración de estos espacios estaba a cargo de las IPS y las aseguradoras. Por eso, de acuerdo con Suárez, esto les implicará trabajar de la mano con las EPS y toda la red de prestadores de servicios de salud.
Por ejemplo, Marta Cecilia Ramírez, directora de la IPS Universitaria, explicó que la Gobernación ya apropió las herramientas tecnológicas para tener monitoreo de todas las camas. Los directores y gerentes deben estar reportando, a través de sus equipos, cómo varía la ocupación camas durante el día e informar al Crue de cualquier cambio.
“Si a una institución le llega por urgencias un paciente para UCI, lo debe reportar al Crue de inmediato. Por ejemplo, si en esa IPS hay camas pero está en un 90 % de ocupación y hay otra que está en un 70 %, el centro podrá pedir su traslado”, indicó Ramírez.
Apoyo en decisiones duras
De acuerdo con Suárez, la siguiente fase es continuar estudiando medidas restrictivas, como la que está implementando en el Urabá, para limitar el número de contagios. En caso de que la ocupación de servicios supere 80 %, se pasaría a la alerta roja.
Por el momento, precisó, no se considera la cuarentena total en Antioquia, dado que aún hay 40 municipios sin casos de covid- 19. Entre otros anuncios, el gobernador (e) enfatizó en que llegarían 50 ventiladores nuevos del Gobierno Nacional para reforzar la atención y que 20 camas más fueron habilitadas en el Hospital General.
Lina Bustamante, secretaria Seccional de Salud, manifestó que el Crue contará con otro apoyo adicional: se va a adecuar el servicio de TeleUCI, atendida por seis intensivistas que brindarán su asesoría y apoyo al personal salud de las regiones y van a facilitar la ubicación de los pacientes en los servicios UCI.
Recordó que el departamento tiene 18 laboratorios, con capacidad para 6.000 pruebas diarias: “El aumento de la demanda hará que nos retrasemos. Tenemos que ser muy honestos. Habrá retrasos en llamadas, en la toma de las muestras y en la atención domiciliaria. Podemos tener una ruta de atención definida, pero no habrá sistema que aguante si esto se desborda”.
Al respecto, Yessica Giraldo Castrillón, epidemióloga de la Universidad Ces, apuntó que si bien la centralización a través del Crue pudiera leerse como una pérdida de autonomía de las instituciones, en realidad busca coordinar las acciones administrativas para que las IPS se dediquen a optimizar y maximizar la prestación del servicio.
Agregó que se ha hablado mucho de la importancia del manejo compasivo, que hace referencia a generar una especie de comités de ética hospitalarios que ayuden a la toma de decisiones difíciles.
“Una de las cosas más duras a las que se ve abocado el personal médico es que no haya disponibilidad de los recursos para todos los pacientes. Lo que genera más temor es tener qué definir quién ingresa y quién no, cómo será esa priorización. Entonces si todo está centralizado será más fácil que un comité de ética pueda dar más apoyo, en tiempo real”, concluyó .
CONTEXTO DE LA NOTICIA
PARÉNTESIS
¿UN FRENO A LA REACTIVACIÓN?
De acuerdo con el gobernador (e), Luis Fernando Suárez, la declaratoria de la alerta naranja sí afectará la reactivación liderada desde ciertas agremiaciones: “Creemos que es prudente poner un freno al proceso de reactivación, pero el éxito a futuro está en lograr el equilibrio entre reactivación y control de la pandemia. El propósito superior es salvar vidas”. Agregó que, por el aumento de casos, en municipios como Nechí, Necoclí, Arboletes y Caucasia se está fortaleciendo los equipos de respuesta inmediata y los cercos epidemiológicos, pero por ahora no son necesarias medidas restrictivas en estas zonas.