RICHARD AGUIRRE FERNÁNDEZ
El presidente Iván Duque acaba de anunciar que el país extiende el aislamiento para prevenir el coronavirus, con las mismas excepciones que hay hasta el momento, y que se enfocan básicamente en garantizar la producción, alimentación y servicios del país, con el objetivo de evitar un golpe más fuerte en la economía, pero sin descuidar la salud.
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Así las cosas, el aislamiento inteligencia al que hace referencia el presidente, que estaba vigente hasta el próximo 1 de agosto, se extenderá hasta el 30 de agosto, previendo que los picos de casos por ciudades se podrían sentir durante este mes. “En los municipios de baja afectación seguimos con los pilotos”, indicó el presidente.
Asimismo, el presidente destacó que el país tiene 267.385 casos confirmados de coronavirus y 121.032 casos activos, pero señaló que, de no haberse tomado medidas, como la cuarentena estricta entre marzo y abril, incluso con la flexibilización, las proyecciones del Instituto Nacional de Salud (INS) apuntaban a tener 1,3 millones de contagiados en lo que pudo ser un primer pico, que se pudo registrar entre 9 y el 16 de mayo.
Por ejemplo, el ministro de Salud, Fernando Ruiz Gómez, dijo que para el caso de Bogotá, el pico de contagios se empezaría a registrar en las próximas dos semanas. “El reto de las dos o tres próximas semanas será Bogotá, por número de personas. Es claro que son como seis ciudades dentro de una ciudad, con una situación diferente en cada localidad”, manifestó el ministro en entrevista con Blu Radio.
Frente a la decisión, el epidemiólogo e infectólogo Carlos Agudelo, de la Clínica Universitaria Bolivariana y del San Vicente Fundación de Rionegro, manifestó que toda medida que busque frenar el aumento de los contagios es positiva. “Para las ciudades donde las camas están siendo ocupadas es una medida necesaria”, ya que al haber más personas en las calles, el riesgo de contagio aumenta.
El asunto, a su juicio, pasa por los picos regionales, como se vieron en Amazonas o Barranquilla, y como se verán en Bogotá o Medellín. Por esto, dice Agudelo, “uno se pregunta si las medidas son necesarias al mismo tiempo para todas las ciudades o si debemos empezar a tomar medidas por regiones”.
En cuanto a Bogotá o Medellín, que están viendo un aumento diario en casos y decesos, el especialista manifestó que el anuncio del presidente es absolutamente necesario. El presidente, por su parte, manifestó que este martes en las UCI del país hay 1.606 personas, equivalentes al 1,32 % de los 121.032 casos activos confirmados.
La medida de cuarentena estricta ya ha sido descartada por el presidente, por lo que representa para la economía. Por ejemplo, 4,9 millones de personas perdieron su empleo en mayo de 2020 al compararlo con el mismo mes del año pasado, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane). “La eventualidad de hacerla en un país como Colombia, con las capacidades que ya tenemos, sería absolutamente extrema, y en este momento no la visualizamos”, dijo el presidente en el Facebooklive del sábado pasado.
También llamó la atención para se mantengan y fortalezcan las medidas de autocuidado, como el uso del tapabocas, el constante lavado de manos y evitar as aglomeraciones, respetando un distanciamiento espacial de por lo menos dos metros.
Sobre la medidas de cuatro días abierto y tres cerrados, aplicada en Medellín, el especialista dice que es acertada, pues es un “acordeón” que se abre y se cierra dependiendo del nivel de contagio y sin impactar de manera drástica los procesos económicos.
Ahora, aunque puede leerse dramático, el presidente ha hecho énfasis en el autocuidado de las personas de más de 60 años, que resultan más vulnerables y con mayor probabilidad de morir en caso de contagio, lo mismo que las personas que padecen hipertensión o diabetes, pues son las dos enfermedades previas que más reportan registran quienes han muerto por el coronavirus en el país.