Libardo Pinto justifica todas y cada una de las actividades: la aglomeración de personas, que los invitados no usaran tapabocas y que no hubiera distancia.
El alcalde Algeciras, Huila, está en el ojo del huracán luego de conocerse que contrajo matrimonio en días de incertidumbre por la pandemia del coronavirus. Además de la ceremonia, Libardo Pinto ofreció una reunión, en compañía de personas sin tapabocas, en el municipio de Campoalegre.
En época donde se debe predicar con el ejemplo el funcionario ofreció una “reunión” en la que asistieron, según él, solo miembros de su familia, que eran unos cincuenta. Como se ve en las imágenes, no había distancia mínima de dos metros entre los asistentes y ninguno tenía tapabocas, para lo que el alcalde de Algeciras tiene una excusa: “¿Por qué no tengo el tapabocas? Pues muy sencillo, porque estoy con mi familia, estoy con mi esposa, estamos con el suegro y estamos cumpliendo con todos los protocolos de seguridad”.
Según Pinto, “no hay ningún inconveniente porque este escenario también estaba cumpliendo con todos los protocolos”. Por más que habla de medidas y protocolos, personal como el camarógrafo y su asistente no estaban usando tapabocas. ¿Qué pasaría si alguno de los encargados del video o de los integrantes de su familia tuviera el coronavirus y fuera asintomático?
En entrevista con Noticias Caracol el alcalde manifestó que “lo primero que hay que aclarar es que no fue una rumba, no fue una fiesta, fue una ceremonia de mi boda. Simplemente lo que hice fue contratar los servicios de cáterin a un establecimiento comercial que cumple con todos los protocolos de seguridad donde me reuní con mi familia”.
Añadió que “fue una boda, una ceremonia espiritual. Yo soy evangélico cristiano. Ahí no hubo rumba, no hubo trago, simplemente la ceremonia y una cena especial con el círculo de familia que cotidianamente comparto con ellos y eso no tiene inconveniente porque aquí estamos atendiendo cada uno de los protocolos”.
Aunque el alcalde de Algeciras insiste en que no hubo fiesta, se ve en las imágenes que varias parejas salieron a bailar el vals, pero bajo las mismas circunstancias cuestionables: sin tapabocas y unos cerca de otros. El mandatario no niega que se presentara un baile y, nuevamente, insistió en que ahí estaban dándose todas las medidas sanitarias.
Ante la presencia de unas cincuenta personas explicó que todas hacen parte de su círculo familiar, que es muy grande.
Tras insistir en reiteradas ocasiones que la ceremonia cumplía con unas medidas de bioseguridad, el alcalde de Algeciras fue cuestionado sobre si se arrepentía o no de esta conducta en un contexto en el que diariamente se le pide a la gente no asistir a eventos para evitar la propagación de coronavirus. Así contestó:
“Estaba actuando sobre la norma. Pero si este acto generó inconformidad a la ciudadanía, para los colombianos, para el pueblo, haber tomado la decisión de reunir a mi familia en una cena, pues expreso y solicito mil disculpas”.