Gobernación logra acuerdos con comunidades indígenas para avanzar en proyecto energético estructural en la Alta Guajira.
Acuerdo clave para instalar cable de guarda
Luego de años enfrentando una crítica inestabilidad en el servicio de energía eléctrica, los municipios de Uribia y Manaure están más cerca de alcanzar una solución definitiva.
La Gobernación de La Guajira, a través de la secretaría de Asuntos Indígenas, liderada por Kenia Ojeda Mengual, informó que se han logrado acuerdos con el mayor número de comunidades indígenas para permitir la instalación del cable de guarda en la línea de alta tensión operada por la empresa Cerrejón.
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“El cable de guarda no solo mejora la calidad de la energía, sino que también actúa como un pararrayos, protegiendo a las comunidades y su entorno de descargas eléctricas atmosféricas”, explicó Ojeda, destacando el impacto positivo que tendrá esta medida para los habitantes de la Alta Guajira.
Transformador móvil como solución temporal
Este avance hace parte de la propuesta del gobernador Jairo Aguilar Deluque, en conjunto con los alcaldes municipales y la veeduría ciudadana, que contempla también la instalación de un transformador móvil de energía por parte de la empresa Air-e. Esta será una solución automatizada y provisional mientras se construye una estación eléctrica definitiva que garantizará un suministro estable y confiable para ambas localidades.
Coordinación con alcaldías y comunidades
Para hacer viable el proyecto, se gestionó la disposición de lotes estratégicos en coordinación con las alcaldías de Uribia y Manaure y las comunidades indígenas, donde se instalarán tanto el transformador provisional como la estación eléctrica definitiva.
Últimos ajustes para el despliegue del plan
Actualmente, Cerrejón avanza en los últimos ajustes técnicos para la instalación del cable de guarda, lo que permitirá poner en marcha todo el plan energético en territorio.
Esta es una “solución estructural y necesaria”, afirmó la Gobernación, señalando que se trabaja con decisión para que los habitantes de Uribia y Manaure cuenten finalmente con el servicio de energía digna y continua que merecen.