Los jugadores no pudieron llegar hasta el Obelisco por la multitud que se salió de control y terminó generando disturbios. Hay 20 detenidos.
AFP Y EFE |
Lionel Messi y la Selección Argentina, campeona del mundo, tuvieron que terminar su caravana de celebración este martes con un sobrevuelo en helicópteros sobre una Buenos Aires desbordada con más de cinco millones de hinchas, sin poder llegar al legendario Obelisco como estaba previsto. La celebración terminó en disturbios y en un triste saldo: tres muertos, 31 heridos y una veintena de detenidos.