Diego Andrés Vargas Riaño
De acuerdo con Properati, los arriendos en clase media en la capital paisa rondan los $2 millones actualmente.
Con la inflación por las nubes de los últimos años, los arriendos en el país se han disparado. El fenómeno se siente con más fuerza en Medellín, donde los cánones fueron —junto a las tarifas del transporte público— lo que más empujó el Índice de Precios al Consumidor (IPC), hasta llevarlo al 1,56% en enero, dato superior al 0,96% del país.
En esa línea, la plataforma inmobiliaria Properati realizó un estudio sobre cuántos salarios mínimos cuesta, en promedio, un arriendo en clase media en 17 de las principales ciudades de Latinoamérica. Descubrió que, en 16, el valor está por encima de 1 salario mínimo.
Este es el caso de Medellín. Properati halló que en una zona de clase media como La América la renta se ubica en alrededor de $2.062.000 (523 dólares), que representa aproximadamente 1,6 salarios mínimos.
Ahí entra la segunda parte del informe, y es que se toma como referencia la recomendación de la Ocde sobre el “ingreso ideal” de los hogares. En esta se postula que el arriendo no debe pesar más del 40% sobre el total de ingresos.
Partiendo de allí, el sueldo mensual “ideal” para que una persona pueda pagar arriendo en Medellín, en clase media, sin “colgarse” con otros gastos, sería de $5.157.548 (o lo que es igual US$1.308 al mes), indica el estudio.
Y aunque el arriendo en la capital paisa resulta ser el más caro entre las ciudades colombianas evaluadas, la situación no es muy diferente en Bogotá o Cali.
En el caso de la primera, el alquiler está en un promedio de $2.010.970 para sectores clase media como Modelia, lo que implicaría un sueldo “ideal” de $5.027.427 para pagarlo; por su parte, en zonas como Valle del Lili, en Cali, ronda los $1.589.061, y las personas requerirían unos $3.966.738.
Eso sí, según Jairo Sarmiento, analista de Properati, “a nivel regional, México destaca por tener las ciudades con costos de alquiler más altos, como Guadalajara y Monterrey, y por ende, los ingresos ideales más altos, mientras que las opciones más asequibles se encuentran fuera de las capitales de Colombia, Ecuador y Argentina, en ciudades como Cali, Guayaquil y Córdoba, respectivamente”.
Razones de alquileres altos
Mauricio Torres, gerente del portal Ciencuadras, apuntó que dentro de las explicaciones detrás del incremento generalizado de los arriendos en Medellín destaca el aumento de la demanda de espacios de renta corta.
Esto, continuó, “ha provocado que se disminuya la oferta de vivienda en arriendo a largo plazo ya que los propietarios prefieren acondicionarlas para alquilarlas por periodos cortos”.
Según el experto, a esto se le suma la inflación anual y la aprobación de la Visa de Nómada Digital que permite a los extranjeros vivir y trabajar en Colombia.
De esa forma, “la demanda por espacios de renta corta en Medellín ha aumentado proporcionalmente al incremento del turismo en la zona, por su clima o por su música; para los extranjeros es muy económico venir a Colombia debido a la devaluación y esto ha hecho que se disminuya la oferta de vivienda en arriendo a largo plazo”.
Los más buscados
Aun con estas dificultades, al cierre de 2023 la oferta de inmuebles en Colombia se concentró principalmente en Medellín y Bogotá, con un 55,97% de participación sobre el total, de acuerdo con Ciencuadras.
Medellín, en particular, concretó el 23,56% de la oferta nacional (en 2022 esa proporción había sido 29,66%); mientras Envigado ocupó el cuarto lugar con el 5,71%.
Además, Sabaneta, Bello y Rionegro aparecieron en el séptimo, el octavo y el noveno lugar, respectivamente.
Un punto importante en estas montañas es que con respecto a 2022, en Medellín se presentó un aumento significativo en las búsquedas de inmuebles realizadas en Belén (7,35% más), Laureles (4,65%) y El Poblado (5,10%).
Así mismo hubo un marcado interés por apartamentos o viviendas ubicadas en Buenos Aires o Floresta.
Mientras el precio los arriendos y la propiedad raíz se dispara, la Medellín de emergencia sigue trepando por las laderas. Hay al menos 65 puntos críticos en los que el riesgo de un desastre, los intereses de los combos y la pobreza confluyen 👇https://t.co/uKgdfz74eq
— Jacobo Betancur Peláez (@JacoboBetancur) February 25, 2024