En los últimos dos años se ha presentado denuncias de por lo menos 50 casos de pedofilia en Omegle en países como Estados Unidos, Reino Unido, Chipre y Colombia.
BRANDON MARTÍNEZ GONZÁLEZ |
Una joven estadounidense de 21 años demandó a Omegle, un sitio web de chat y videollamadas en el que no es necesario registrarse, por haberla emparejado con un pederasta que la obligó a convertirse en su esclava sexual cuando era una niña.
La demanda en contra del sitio web está sustentada en que su funcionamiento no garantiza la seguridad de ninguna persona, ya que su mecanismo de “hacer match” sin tan siquiera registrarse, permite que menores de edad como la estadounidense terminen involucrados con adultos como Ryan Fordyce, un hombre canadiense que terminó siendo un pederasta.
¿Cómo conoció a su abusador?
La mujer empezó a utilizar Omegle cuando tenía once años. Entró por primera vez a la plataforma en una pijamada con sus compañeras del colegio. Después, cuando estaba sola en su casa ingresó de nuevo. Ahí fue cuando conoció a Fordyce, con quien la página web la emparejó al azar.
“Fue capaz de manipularme de inmediato. Muy pronto me estaba obligando a hacer cosas que un niño no debería tener que hacer”, le dijo la estadounidense a la BBC. Al parecer el hombre le exigía desde una manera de peinarse, hasta que le mandara videos masturbándose u orinando.
Fordyce sometió a la entonces niña a su antojo. La obligó a seguirle enviando fotos y a no decirle nada a sus padres porque la convenció de que estaba siendo cómplice de compartir y fabricar material de abuso de menores de edad. Ella estaba asustada y guardó silencio. “Pasé gran parte de mi infancia a su entera disposición. Todos los días estando a la voluntad de otra persona que tenía las peores intenciones para los niños”, dijo.
La mujer estuvo en esa situación durante tres años, hasta que el hombre pareció perder interés en ella, dejó de contactarla y perdieron comunicación. Ella pensó en no decir nada de la situación, hasta que una agente de la policía del municipio de Brandon, en Canadá, la ubicó porque en una investigación que hizo sobre alguien que compartía material de abusos a menores en internet, encontró fotos suyas.
En una carpeta del computador de Fordyce había 220 imágenes de la estadounidense de cuando tenía entre 11 y 14 años. La investigadora dio con ella luego de que encantara la información de su historial académico en una carpeta del ordenador del canadiense.
Fordyce fue capturado por las autoridades el 12 de enero de 2018 y fue enviado a prisión porque, además de las fotos de la mujer estadounidense, encontraron en su computador carpetas con imágenes de otras dos víctimas.
Demanda contra Omegle
La mujer estadounidense, que asegura que la situación que vivió por medio de Omegle la dejó herida que no ha podido curar 10 años después de que empezó a ser víctima del canadiense, demandó a la plataforma y al parecer su caso podría marca un hito en las denuncias contra redes sociales.
“En Estados Unidos tenemos la sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones, que hace que sea increíblemente difícil demandar alguna vez a una plataforma online”, explicó Carrie Goldberg, la abogada de la mujer estadounidense, que agregó que la justicia de ese país debe cambiar ese tipo de normas, porque plataformas como Omegle se pueden convertir en un lugar perfecto para pederastas, debido al sistema de emparejamiento aleatorio y la falta de advertencias o de verificación de la edad de quienes acceden.
La abogada espera poner esa situación a prueba en un juicio que podría asegurarle a la víctima una indemnización millonaria y forzar cambios en el diseño de Omegle. En contra de esta plataforma también hay denuncias de por lo menos 50 casos de pedofilia en los últimos dos años en países como Estados Unidos, Reino Unido, España, Chipre y Colombia. El juicio contra la plataforma sería en los próximos meses.