Autoridades temen que la cifra de fallecidos aumente por la gravedad con que algunos heridos llegaron a los centros asistenciales.
Al menos 17 personas murieron y decenas resultaron heridas este miércoles al descarrilarse un tren de pasajeros que chocó con una excavadora en el centro de Irán , informaron medios estatales.
«Diecisiete personas murieron y otras 37 heridas fueron trasladadas al hospital. El balance de muertos seguramente aumentará porque hay varios heridos en estado crítico», anunció el portavoz del servicio nacional de rescate, Mojtaba Khaledi, citado por la televisión estatal.
Según imágenes del canal Iribnews, el accidente se produjo en una zona desértica cerca de Tabas, a 900 km al suroeste de Teherán, en la línea que une las ciudades de Mashhad y Yazd.
Imágenes difundidas por la agencia Isna mostraban un vagón volcado en la vía y otros cuatro encastrados unos encima de otros.
«El tren, que transportaba 348 pasajeros, descarriló tras chocar con una excavadora» que se encontraba cerca de las vías, dijo Mir Hasan Musavi, subdirector de ferrocarriles de Irán a la televisión estatal. El accidente se produjo a las 05:30 hora local.
Según el jefe de operaciones de rescate, Mehdi Valipur, cinco de los once vagones del tren descarrilaron.
Accidentes mortales
El accidente se produce dos semanas después del derrumbe de un edificio en construcción en el suroeste de Irán, en el que murieron 43 personas.
El 23 de mayo, el edificio Metropol en construcción en Abadán, una de las principales ciudades de la provincia de Juzestán, en el suroeste, se derrumbó parcialmente en medio de una calle muy transitada.
La catástrofe, una de las más mortíferas de los últimos años en Irán, provocó manifestaciones en todo el país en solidaridad con las familias de las víctimas y contra las autoridades, acusadas de corrupción e incompetencia.
En Abadán y otras ciudades, especialmente en el centro del país, hubo marchas nocturnas para recordar a las víctimas y exigir que juzguen a los responsables.
La justicia dijo que había detenido a 13 personas, entre ellas el alcalde de Abadán y dos exalcaldes, acusados de ser «responsables» de la tragedia.
En 2016, 44 personas murieron y 82 resultaron heridas cuando dos trenes, uno de ellos detenido, chocaron y se incendiaron en el norte de Irán. El director de la empresa ferroviaria dimitió y cuatro empleados fueron detenidos.
El accidente más mortífero se produjo el 18 de febrero de 2004, cuando un tren de mercancías explotó con su carga de azufre, gasolina y fertilizantes en medio de aldeas cercanas a la ciudad de Nishapur, con un balance de 328 muertos y cientos de heridos.
En enero de 1993, una colisión entre dos trenes a dos kilómetros de Pishva, en la línea Teherán-Mashhad (noreste), mató a 24 personas e hirió a 45. Según un comunicado oficial, se debió a un «error de señalización».
