ECUADOR:
La Corte Nacional de Justicia determinó que los trabajadores que renuncien voluntariamente para acogerse a la jubilación no podrán recibir la bonificación por desahucio.
La sentencia establece que conceder este pago junto con la pensión significaría un doble beneficio por la misma causa. Esta decisión tiene un impacto directo en la planificación financiera de los trabajadores próximos a jubilarse y genera un alivio económico para los empleadores.
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Una reciente sentencia de la Corte Nacional de Justicia (CNJ), emitida el pasado 29 de enero de 2025 dice lo siguiente: “El trabajador que haya decidido terminar su relación laboral por retiro voluntario con la finalidad de acogerse a los beneficios de la jubilación, no podrá acogerse a la bonificación por desahucio contemplada en el inciso segundo del artículo 184 del Código de Trabajo, pues se estaría beneficiando dos veces por la terminación de la relación laboral”.
Esta decisión de la Corte tiene varias implicaciones tanto para los trabajadores que buscan jubilarse como para los empleadores y el sistema laboral en general. A continuación, se detallan sus efectos principales:
1. Restricción en el acceso a la bonificación por desahucio: La sentencia establece que los trabajadores que renuncien voluntariamente para acogerse a la jubilación no tendrán derecho a la bonificación por desahucio, ya que se considera que ya reciben un beneficio económico por el fin de su relación laboral a través de la jubilación. Esto evita que se beneficien simultáneamente de dos compensaciones.
2. Impacto en la planificación de retiro de los trabajadores: Los trabajadores que estaban considerando su jubilación deberán tomar en cuenta que no recibirán la bonificación por desahucio si deciden retirarse voluntariamente. Esto puede afectar su planificación financiera, ya que la bonificación por desahucio equivale a 25% de la última remuneración mensual por cada año de servicio en la empresa, lo que podría representar un monto significativo.
3. Beneficio para los empleadores: Las empresas ya no estarán obligadas a pagar la bonificación por desahucio en estos casos, lo que reduce costos laborales al momento de la jubilación de un trabajador. Esto puede ser un alivio financiero para empleadores, especialmente en sectores donde hay una alta proporción de trabajadores cercanos a la jubilación.
4. Posible incentivo a la jubilación patronal: Dado que la jubilación patronal (cuando es el empleador quien despide al trabajador por jubilación) sí contempla el pago de una indemnización, algunos trabajadores podrían preferir esperar a que el empleador tome la decisión en lugar de retirarse voluntariamente. Esto podría generar estrategias de negociación entre trabajadores y empleadores sobre el momento y la forma en que se da la terminación de la relación laboral.
5. Seguridad jurídica en la aplicación de la norma: Antes de esta sentencia, había interpretaciones contradictorias sobre si un trabajador podía recibir tanto la jubilación como la bonificación por desahucio. Con esta resolución, se unifica el criterio y se establece un precedente claro para futuros casos, brindando mayor seguridad jurídica en el ámbito laboral.
En conclusión, esta decisión refuerza el principio de que no se puede obtener doble beneficio por la terminación del contrato, tiene un impacto directo en la planificación financiera de los trabajadores próximos a jubilarse y genera un alivio económico para los empleadores. (JS)