PUERTO RICO:
Se trata de una persona que viajó a Florida y reside en la región de Caguas. Aún esperan por el resultado de dos casos sospechosos.
El Departamento de Salud confirmó mediante secuencia genómica la presencia de la variante ómicron en al menos uno de los tres casos sospechosos de la nueva variante del COVID-19 en Puerto Rico.
Según la información ofrecida este lunes por la portavoz de la agencia, Lisdián Acevedo, el resultado oficial se recibió esta mañana, mientras se espera por la confirmación final de los otros dos casos que pertenecen al mismo brote y que, preliminarmente, fueron adjudicados a ómicron.
La doctora Melissa Marzán, principal oficial de epidemiología de Salud, había adelantado ayer, domingo, que la agencia esperaba por los resultados finales, para mediados o finales de esta semana.
“Particularmente este brote, identificamos tres muestras sospechosas, una familia con historial de viaje. Hasta el momento, esos tres casos han tenido síntomas leves y ninguno ha requerido hospitalización. Tienen historia de estar completamente vacunados”, indicó Marzán a El Nuevo Día.
Aunque los individuos estaban vacunados, la doctora precisó que no habían recibido su refuerzo de vacuna contra el COVID-19. Las tres personas regresaron de un viaje reciente a Florida, uno de los 27 estados de Estados Unidos en donde se han detectado casos de ómicron, observada por primera en Sudáfrica el pasado noviembre. Puerto Rico se convierte de esta manera en la jurisdicción número 28 de Estados Unidos en confirmar la presencia de ómicron.
Los tres casos pertenecen a la región de Salud de Caguas y están en los grupos de edades de 45 años o menos. Los diagnósticos sospechosos en la isla fueron notificados a Salud por uno de los laboratorios que son parte de la red de vigilancia genómica de la agencia.
Marzán alertó sobre un aumento en brotes relacionados a viajeros, con 16 este viernes en relación con los 11 reportados la semana anterior, de acuerdo con el informe sobre indicadores epidemiológicos en Puerto Rico. Además, el total de brotes la semana anterior fue 79, pero este viernes la cifra alcanzó los 95, con 246 casos confirmados y 176 probables.
“Hemos visto un aumento desde la semana de Acción de Gracias”, subrayó la epidemióloga. A pesar del esperado aumento en casos, Marzán indicó que los números no están fuera del rango observado durante el último trimestre del 2021, con hasta 105 brotes observados en una semana.
Aunque todavía no hay resultados concretos en cuanto al impacto de ómicron en gravedad de enfermedad, hospitalizaciones y muertes, médicos y expertos en Sudáfrica sospechan que la nueva variante está causando casos de COVID-19 más leves que la variante delta, aunque parece estar expandiéndose más rápido. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y las autoridades salubristas en Estados Unidos y otras partes del mundo investigan los efectos de la nueva variante.
La variante ómicron se notificó por primera vez a la OMS el 24 de noviembre de 2021, aunque se detectó por primera vez en muestras recolectadas el 11 noviembre del 2021 en Botsuana y el 14 de noviembre del 2021 en Sudáfrica. El 26 de noviembre, la OMS la clasificó como variante de preocupación, y el 30 e noviembre los CDC en los Estados Unidos la clasificaron de igual modo. El primer caso de ómicron confirmado en los Estados Unidos se confirmó el 1 de diciembre del 2021.
En su actualización más reciente el 11 de diciembre, en torno a ómicron, los CDC sostienen que “es probable que la variante ómicron se propague con mayor facilidad que el virus original del SARS-CoV-2″, pero aún se desconoce la facilidad con que se propaga la variante ómicron en comparación con la variante delta. Es esperado que cualquier persona infectada por la variante ómicron pueda propagar el virus a otras personas, incluso si están vacunadas o no tienen síntomas.
No obstante, todavía se necesitan más datos para saber si las infecciones por la variante ómicron, y en especial los casos de reinfección e infección en vacunados, causan enfermedad más grave o muerte, en comparación con otras variantes.
Marzán reiteró la necesidad de que las personas que cualifican para recibir sus dosis de refuerzo de las vacunas contra el COVID-19, lo hagan lo antes posible. “A los viajeros de igual forma, primero ponerse su dosis de refuerzo si tienen planes de salir de viaje o igualmente si usted va a recibir familia, exhortar a su familia o amigos a que tengan sus dosis de refuerzo como parte de las reglas del hogar para las actividades de familia”, sostuvo.
La variante delta sigue siendo la principal variante que circula en Estados Unidos y el mundo, aunque sigue siendo clave monitorear el comportamiento de ómicron en las próximos días y semanas.
