Se denomina año bisiesto a aquel periodo anual que contiene un día adicional en el mes de febrero con el objetivo de ajustar y equilibrar el año cronológico con el solar.
¿Qué pasaría si no existieran los años bisiestos?
La razón de los años bisiestos es mantener nuestro calendario en alineación con la órbita de la Tierra alrededor del Sol. En un principio, esta equivocación sería de unos pocos días, pero con el paso de algunas décadas las fechas ya no corresponderían a las estaciones relativas. Por ejemplo, después de 120 años el día de Año Nuevo coincidiría con un día a principios de febrero.
El calendario gregoriano es actualmente utilizado de manera oficial en casi todo el mundo. Fue impuesto por el papa Gregorio XIII en el año 1582 y ha sido adoptado gradualmente en distintos países.
¿Por qué el 2024 es un año bisiesto?
La Tierra tarda 365,24 días en girar alrededor del Sol. Para compensar la fracción de día que no se cuenta, se añade un día adicional al año, el 29 de febrero, en los años bisiestos.
¿Cada cuánto tiempo hay un año bisiesto?
La mayoría de los años que son divisibles por 4 son bisiestos. Sin embargo, hay algunas excepciones. Los años que son divisibles por 100 pero no por 400 no son bisiestos.
La expresión ‘año bisiesto’ deriva del latín
En español: “Sexto día antes del mes de marzo», que correspondía a un día extra intercalado entre el 23 y el 24 de febrero por Julio César. Esto se debe a que, en el calendario juliano, el 24 de febrero era el sexto día antes de las calendas (primer día del mes) de marzo. Los romanos no contaban los días del mes del 1 al 31, sino que tomaban tres fechas de referencia: calendas, nonas e idus.
Los años bisiestos existen hace 2.062 años
El año bisiesto se introdujo para sincronizar nuestro calendario y el movimiento orbital en Roma, bajo el mando de Julio César, asesorado por el matemático y astrónomo Sosígenes de Alejandría.