PERÚ:
Hoy el Perú se viste de luto por un hombre que lo amó profundamente, que lo pensó con dedicación, con verdadero interés, con curiosidad, con dolor y a veces con desasosiego; que le dedicó gran parte de su notable obra, su memoria, su tiempo y su voz. Una voz que alzó siempre que fue preciso, con ingenio, tenacidad y valor.
Mario Vargas Llosa ha fallecido, su ausencia deja una honda tristeza. Le hará demasiada falta al mundo de las letras, al del debate, al de la academia, pero su legado lo sobrevivirá: la maestría de su estilo literario, la magia extraordinaria de su narración lo convirtieron en uno de los más importantes actores de la literatura contemporánea y ese sino universal se impondrá a los tiempos.
Desde esta humilde tribuna, el equipo que conforma esta redacción se funde en el abrazo sincero de todos los compatriotas que sienten honestamente la partida de nuestro más preclaro e inmortal escritor.
A su familia, todo nuestro sentimiento. Que sepan que su imagen, su verbo, su sonrisa se quedarán para siempre en nuestro corazón. Que lo admiramos, lo queremos, lo leemos, lo releeremos y lo recordaremos como el hombre fuerte, brillante, preocupado, contestatario y libre que fue.