Lo que ocurre en el sistema digestivo afecta al cerebro, según varios estudios. Conoce cuáles son las señales de una microbiota alterada.
Lo que ocurre en el sistema digestivo afecta al cerebro, según varios estudios. Conoce cuáles son las señales de una microbiota alterada.
TOMADA DE:https://www.eluniversal.com.co/
¿Sabías que lo que pasa en tu sistema digestivo afecta directamente a tu salud mental? Aunque esta relación sorprendente sigue en investigación, diversos estudios confirman que la microbiota intestinal, lo que por mucho tiempo se le llamó flora intestinal, tiene una influencia clave en las sustancias presentes en el cerebro, favoreciendo el desarrollo de ciertas afecciones.
“La interconexión entre la microbiota intestinal y el cerebro es clara y multifacética, la evidencia muestra que los microorganismos intestinales pueden influir en la neuroquímica cerebral y en los comportamientos relacionados con la salud mental”, indica el artículo ‘Impacto de la Microbiota Intestinal en la Salud Mental’, publicado en la revista científica Journal Growing Health.
De esta manera, se ha encontrado que pacientes con diagnóstico como ansiedad, depresión, trastorno obsesivo compulsivo, demencia y autismo tienen alteraciones similares en su microbiota y experimentos enfocados en la transformación de este complejo de bacterias demuestran que sí tienen una incidencia en la mejoría de estas afecciones.
“Esta conexión sugiere un enfoque integrador para abordar trastornos psiquiátricos que tradicionalmente se han tratado de manera aislada del sistema gastrointestinal”, señala la publicación del Journal Growing Health.
¿Qué es la microbiota intestinal?
Para entender un poco más esta relación entre intestinos y cerebro, es clave tener presente que se llama microbiota “a las colonias bacterianas y virales que tenemos en nuestro sistema digestivo, principalmente a nivel intestinal. Se desarrollan desde la fase in utero, siendo clave desde el momento del nacimiento. A través de la vida diaria se va creando y se va modificando de acuerdo con la edad”, explica Mario Enrique Díaz Cortés, reumatólogo.
El especialista destaca que un factor determinante para contar con una microbiota equilibrada es nacer por parto vaginal, pues en ese momento el recién nacido recibe importantes virus y bacterias de su madre.
Sin embargo, también son esenciales los hábitos de vida saludables como hacer ejercicio, evitar alimentos ultraprocesados, llevar una alimentación sana y no tener adicciones.
Relación intestino – cerebro: las hormonas son claves
Ana Milena Isaza Narváez, médica psiquiatra y psicoterapeuta homeópata, vocera de Heel Colombia, explica que la microbiota tiene un papel destacado en la producción de diversos neurotransmisores e influye en el desequilibrio de algunas hormonas como el cortisol, que está asociada a los niveles de estrés.
“De la microbiota depende cómo absorbemos los nutrientes a través de nuestro intestino y cómo estos nutrientes se procesan en esas hormonas. Básicamente está afectando las hormonas, el cortisol y también está afectando nuestra parte inflamatoria. Entonces, esto desregula o hace un cambio general en la forma en como todo nuestro organismo reacciona y cómo nos sentimos”.
Señales de que tu microbiota está en desbalance
Estas son algunas señales que indican que la microbiota intestinal está alterada:
– Distensión abdominal y gases frecuentes.
– Diarrea o estreñimiento crónico.
– Intolerancias alimentarias nuevas o empeoradas.
– Fatiga persistente sin causa aparente.
– Dificultad para concentrarse o “niebla mental”.
– Trastornos del sueño o insomnio.
– Problemas en la piel (acné, eccema, rosácea, psoriasis).
– Inflamación o dolor articular sin causa clara.
– Ansiedad o depresión sin un detonante claro.