Las afectadas denuncian que sus peticiones y quejas no son atendidas por la entidad.
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El desespero llevó a un grupo de madres de niños con discapacidad a encadenarse a las afueras de las instalaciones de la EPS Sanitas en Santa Marta para lograr atención médica para sus hijos.
Una de las madres afectadas relató que “mi hijo tiene parálisis cerebral, lo operaron hace dos meses de la cadera en Medellín y no me prestaron el servicio del traslado del aeropuerto a la casa, tuve que pagarlo particular”.
“Luego tuvo un control de la cirugía y cuando llegué al hospital en Medellín me enteró que Sanitas no pagó citas por lo que tuve que recurrir a mis amigos, poner publicaciones en Facebook y hacer una colecta porque cada cita tiene un valor de $140 o $190 mil pesos”, dijo la madre.
Agregó que en estos momentos no cuentan con un canal de comunicación efectivo con la entidad de salud para solucionar sus inconvenientes y afirman que “estamos desamparados, nadie responde, no hay teléfono, solo un correo donde escribe y responden en 3 meses”.
Finalmente, denuncian que el cambio de gerente de la entidad los ha afectado y “necesitamos a alguien que de verdad nos apoye”.