EDWIN TORRES PADRÓN @ElUniversalCtg
Desobedecer las restricciones en el país por la pandemia del COVID-19 tiene a un nativo de La Boquilla en una tumba y a un venezolano preso en la Cárcel de Ternera.
En la madrugada del pasado domingo 12 de julio hubo violación de las medidas sanitarias, intolerancia, riña y sangre. Como consecuencia de ese lance fatal murió Samir Contreras Julio, de 26 años y residente en esa localidad de la llamada Zona Norte de Cartagena.
El motivo real de lo que originó la gresca aún se desconoce. Solo está claro que a las 12:30 a. m. la tragedia se cruzó en la vida de Contreras cuando ingería licor con su hermano y amigos en la vía principal de La Boquilla, a menos de una cuadra de su vivienda.
Tal parece que el licor ya hacía estragos en Samir y quizás por eso comenzó a molestar a un peatón que pasaba frente a ellos. El desconocido para ellos le respondió los insultos y siguió su camino. A pesar que la situación pudo haber quedado allí, Samir y su hermano se fueron detrás de aquel sujeto y esa fue la peor decisión.
El rival le salió más fuerte a ambos y en la gresca fue asesinado Samir de una cuchillada en el tórax. Su muerte fue casi en el acto. El presunto agresor fue retenido por la Policía esa misma madrugada.
Tras ser llevado a audiencias preliminares de legalización de captura e imputación de cargos, un juez con funciones de Control de Garantías cobijó con medida de aseguramiento a Carmelo Tomás Patiñe Beleño, de 25 años, y le impuso detención intramuros por el delito de homicidio.
Sobre el hecho, la Fiscalía recopiló la siguiente versión a través de testigos: “la víctima caminaba en compañía de su hermano buscando algunas bebidas. Al encontrarse con Patiñe Beleño se inició una discusión y, pese a que se alejaron, al parecer el presunto agresor los siguió y los atacó con arma blanca”.
45 muertos en riñas
En lo que va del 2020, cuarenta y cinco personas han muerto en riñas en Cartagena y sus corregimientos. En julio, las víctimas mortales son cinco en cuatro casos. En enero fueron 8 las personas asesinadas en riñas, 6 en febrero, 7 en marzo, 8 en abril, 3 en mayo y 8 en junio.
El séptimo mes del año comenzó con un doble crimen en el barrio Simón Bolívar, el domingo 5. Esa noche se desató una gresca que acabó con la vida de Jesús David Daza Castro, de 24 años; y Rey Jackson Martínez Calvo, de 30. Ambos fueron acuchillados. Por ese hecho fue capturado Francisco de Jesús Ripoll Rubio, a quien un juez envió a la Cárcel de Ternera.
El siguiente caso fue el ocurrido en La Boquilla, el domingo 12. Tres días después, el miércoles 15, en la tarde, la Policía capturó a José Sánchez Benedetti, de 40 años, poco después del asesinato de su sobrino Ferney Andrés Ríos Sánchez, de 16 en el barrio Palestina, sector Paraíso II.
El adolescente fue acuchillado en el tórax en medio de una discusión con el hermano de su mamá por problemas de convivencia que ya venían de hace días. Un juez aseguró a Sánchez por homicidio y lo envió a la Cárcel de Ternera.
El jueves 16, también en la tarde, en el sector Los Tamarindos, del barrio El Pozón, se produjo una riña que desencadenó la muerte de York Luis Padilla Montero, de 20 años y natural de Venezuela.
Según Yurka Padilla, tía del fallecido, este habría intentado mediar entre dos personas que sostenían una riña, presuntamente por una mujer.
Por este hecho de intolerancia, la Policía capturó a Raúl Andrés Pacheco Corrales, de 23 años.