GUSTAVO OSPINA ZAPATA
Las autoridades ambientales de Antioquia reportaron el avistamiento de un oso andino en el Suroeste antioqueño, lo que motivó de inmediato la activación de un plan de socialización con las comunidades para que respeten la vida del animal.
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El ejemplar fue visto y grabado en video en inmediaciones del corregimiento Santa Rita del municipio de Andes. La grabación dura 30 segundos y en ella se aprecia que el oso camina por una zona montañosa, no muy frondosa en árboles, y al detectar al humano que lo graba se va montaña arriba hasta perderse de vista. Es un animal adulto y saludable, según lo consigna la grabación.
Ante el hallazgo, el Equipo de Fauna Silvestre del Área Metropolitana del Valle de Aburrá (AMVA), Corantioquia y el operador para estos casos, Precoodes, en asocio con la administración municipal de Andes y guardabosques, visitaron la zona del avistamiento, donde invitaron a sus habitantes a cuidar el oso andino y proteger su hábitat natural.
En total se visitaron 20 viviendas ubicadas en esta zona, donde abundan historias relacionadas con el avistamiento de este animal silvestre.
Las actividades de socialización estuvieron encabezadas por la Oficina Territorial Citará de Corantioquia y la Secretaría de Desarrollo Económico y Social del municipio de Andes, acompañados por los guardabosques que continuamente monitorean la Reserva Forestal Protectora Regional (RFPR) Farallones del Citará, área protegida declarada por Corantioquia.
Según los testimonios de la comunidad, en los últimos días se han observado otros dos osos andinos en la zona. Los han visto salir del bosque hacia zonas más despejadas, sacudiendo árboles de guayaba para posteriormente alimentarse de sus frutos.
Corantioquia, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Precoodes (entidades que hacen parte del convenio de fauna silvestre) señalaron que la presencia de este animal indica que el ecosistema le está ofreciendo refugio y alimento para sustentar su vida.
Sebastián Jiménez, biólogo del Equipo de Fauna Silvestre, indicó que el oso andino se distribuye entre los 400 metros y sobrepasa los 4.000 metros sobre el nivel del mar, abarcando gran cantidad de ecosistemas, por lo cual “es una especie relativamente fácil de observar en sitios altamente conservados donde ella se distribuye”.
Añadió que al observarlo es mejor alejarse lenta y discretamente, ya que es normal su movilización por estas zonas.
“Es una especie importante para los ecosistemas, ya que dispersa semillas y regenera los bosques debido a su dieta altamente vegetativa. Su presencia es sinónimo de que los ecosistemas se encuentran estables, pues si están es porque pueden encontrar alimento para subsistir”, añadió.
Las autoridades aclararon que el animal no es agresivo. Laura Andrea Navarrete, vocera de la Oficina Territorial Citará de Corantioquia, informó que a las comunidades se les explicaron temas sobre el hábitat, los alimentos y la reproducción del oso andino. Y se les insistió en que “no es una especie que genere peligrosidad para las personas, a las que se les pidió que difundieran el mismo mensaje entre todas las personas del territorio”.
El oso de anteojos se conoce también como oso andino y oso frontino, su nombre científico es Tremarctos ornatus, que hace referencia a las marcas de pelo claro que frecuentemente aparecen en su rostro, como si fueran adornos. Su alimento preferido son frutos y bromelias y ocasionalmente se alimenta de animales pequeños o animales sin vida que encuentra en su camino.
Dentro de las acciones emprendidas por parte de Corantioquia para la protección del oso de anteojos, se destaca la declaratoria de 4 áreas protegidas en el Suroeste y Occidente antioqueños, cuyos planes de manejo influyen positivamente en el ecosistema sumando más de 77.131 hectáreas dedicadas a la protección de hábitats naturales, preservación de los recursos naturales renovables y la conectividad biológica.
La corporación recuerda que en 2015, en asocio con la Gobernación de Antioquia, adquirió dos predios que suman más de 4000 hectáreas de bosque nativo, que forma parte de la RFPR Farallones del Citará, muy cercanos a la zona donde fue avistado el oso.