“Esto se tiene que arreglar de alguna forma”, le dijo “Antonio Medina” a alias Rambo en un diálogo en el que se reprocharon por la dura confrontación en Arauca.
Como si se tratara de una conversación entre viejos amigos, alias Antonio Medina, jefe de las disidencias del frente 28 de las Farc, y alias Rambo, cabecilla del Eln en Arauca, se saludaron a través de los radios de comunicación. Fue un diálogo entre combatientes que se conocen desde hace muchos años, y la cordialidad hizo su asomo incluso en los momentos en los que hubo reclamos por los guerrilleros caídos en manos del bando contrario.
Pero lo que más sorprendió en este diálogo entre ambos cabecillas, fue el momento en el que hablaron de una tregua para calmar el sufrimiento de la población civil araucana, como quedó plasmado en un audio entre ambos combatientes, que fue conocido por EL COLOMBIANO .
El primer paso lo dio “Medina”, y aunque inicialmente “Rambo” se mostró desconfiado, con el paso de los minutos fue cediendo a la idea de un encuentro para bajarle temperatura a la confrontación Eln-disidencias de las Farc que en lo que va de 2022, ha dejado 228 personas asesinadas en el departamento de Arauca.
—A ver si algún día nos sentamos y hablamos güevón, le dijo alias Antonio Medina a alias Rambo.
—Bueno, bueno, si tiene la voluntad, demuéstrala, le respondió el jefe del Eln.
–¿Cómo quiere?, refutó “Medina”
–Si quiere nos topamos los dos personalmente, respondió alias Rambo.
–Es que ni usted viene donde yo estoy ni yo voy donde usted diga, le dijo “Medina”.
Al fondo de cada conversación se escuchaban las interferencias propias de los radios punto a punto, utilizados por los guerrilleros y los disidentes debido a su largo alcance, y una que otra voz de los hombres armados encargados de cuidar a sus comandantes, ahora en guerra.
“Bueno pues yo creo que los dos (somos ) los que estamos tragando mierda, poniéndole el pecho a esto. Deberíamos buscar canales para arreglar esta situación, hermano. Esta fuerza que estamos perdiendo la deberíamos empuntalar hacia la burguesía que es lo que nos corresponde, no entre nosotros, esto es una vergüenza mano”, le dijo “Medina” a “Rambo”; este, al final de la conversación, le respondió que deberían respetar a los civiles y dejarlos por fuera de la confrontación. (Ver conversación anexa).
Bienvenida la tregua
La única solución que encontró la mujer ante las balas que empezaron a silbar por el techo de la vivienda, fue tirarse al piso y agachar la cabeza. Imitó a las gallinas que tiene en su corral y trató de proteger a sus hijos, abrazándolos y metiéndolos bajo la cama o en el corredor del cuarto mientras afuera los tiros espantaban a los perros que corrían despavoridos buscando un refugio. La escena es en la vereda La Siberia, en Tame (Arauca) y ocurrió el pasado 11 de julio cuando las disidencias de las Farc se encendieron a plomo con los del Eln.
Esta confrontación puso en riesgo a las comunidades campesinas e indígenas de la zona, y fue de tal magnitud, que el personero de ese municipio, Juan Carlos Villate, lanzó una alerta en la que solicitaba a los actores armados “el respeto por el Derecho Inernacional Humanitario”, y a las autoridades a “activar los mecanismos de protección y asistencia a la población civil afectada”.
Pero no solo La Siberia ha resultado afectada, La Holanda, Gran Bucare, Temblador, La Esperanza, Siberia II y Las Nubes han sentido el miedo sembrado en sus caminos y campos por las balas que retumban a cualquier hora del día y la noche.
Es por esta razón que para un líder de esta zona, quien pidió reserva de su nombre, que las disidencias hablen de una tregua, es un respiro ante la ola de violencia que se ha incrementado en los últimos siete meses.
“Creemos que si ellos hablan de parar es lo mejor. Llevamos seis meses viviendo en la zozobra. A veces ya no podemos salir tranquilos a nuestras labores del campo porque cuando menos piensa se arma el traqueteo (balacera) y nos toca coger pal monte hasta que se termine. Con ese mensaje, podemos vivir un poco en paz”, expresó el líder.
Este araucano agrega que el Eln y las disidencias ejercen mecanismos de regulación y control como el de permitir que salga una sola persona por familia al pueblo para hacer las compras, “y dejan a la otra como garantía para cuando uno vuelve. Cuando uno llega, revisan lo que uno compró y preguntan si uno habló con el Ejército o la Policía”.
Y es que Arauca ha visto la estela de sangre y terror que han dejado los grupos armados ilegales a su paso. Según las fuentes oficiales, entre enero y julio de 2022, perdieron la vida 228 personas. A estos asesinatos, que ocurren casi a diario, se suma el desplazamiento de 808 familias (2.687 personas) que abandonaron los territorios por miedo a la confrontación en estos siete meses de 2022, según datos de la Defensoría del Pueblo.
Ejército rechazo el audio
Desde Arauca, el comandante de la Octava División, general Jorge Eduardo Mora López, desestimó el audio de la conversación entre “Antonio Medina” y “Rambo”, e indicó que lo que se ha hecho es darle mucho realce a esa conversación.
“Este audio lo hemos tenido de parte de Inteligencia Militar y por parte de la red de Participación Civica este tipo de audios donde ellos quieren conversar para terminar esta confrontación o quizás para aumentarla, porque sabemos que desde los primeros meses del año han estado en esa confrontación en territorio venezolano y territorio colombiano”, dijo el alto mando militar.
El general Mora agregó que es deplorable como los integrantes de las disidencias y del Eln “hablan de la muerte de seres humanos, son personas que solo piensan en asesinar y no respetan ni a los muertos”.
El diálogo entre “Medina” y “Rambo” terminó con el compromiso de no atacar a sus familias y de negociar en medio del fuego, pero sin afectar a la población civil que no ha tenido un respiro desde que se recrudeció la confrontación.
