Según el alcalde, a sus antecesores no les importaba que hubiera barrios sin agua. La realidad muestra que se ejecutaron planes para llevar servicio.
Se me salió, pero es la verdad. Con la gente no se juega. pic.twitter.com/qO1cENYHrD
— Daniel Quintero Calle (@QuinteroCalle) August 30, 2022
Sea al calor de la emoción o con la intención de desinformar o desconocer lo que hicieron otros, a veces los mandatarios mienten. Eso es lo que evidencian las afirmaciones hechas esta semana por el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, quien dijo estar “emputado” porque los gobernantes anteriores, a sabiendas de que en la ciudad había sectores sin servicio de agua potable, no hicieron nada por solucionarlo.
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Las afirmaciones se dieron el pasado lunes 29 de agosto cuando Quintero, luego de inaugurar un acueducto en el barrio Belalcázar, al norte de la ciudad, textualmente expresó: “Me enojo yo con las administraciones anteriores, que viendo barrios que no tenían agua potable y no les importaba, y no les llevaban el agua que necesitaban, por eso y por muchas otras cosas uno se emputa, por eso me da rabia cuando veo que se roban los recursos públicos que podían ser utilizados pa’la gente, para llevar acueducto y alcantarillado donde no hay acueducto y alcantarillado”.
Pero las evidencias muestran que el alcalde no dijo la verdad. En Belalcázar, ese día, se protocolizó la llegada del agua potable a 315 familias, que empezaron a disfrutar de conexión a servicios de acueducto y alcantarillado. Lo anterior en el marco del programa Conexiones por la Vida, de EPM, que es la continuidad de un programa llamado Unidos por el Agua, que tiene un antecedente de 8 años de historia y con decenas de miles de familias beneficiadas hasta el momento. Es el mismo programa con otro nombre.
Así es la historia real
En 2014 corría el tercer año del gobierno de Aníbal Gaviria, actual gobernador de Antioquia, y su administración, en asocio con EPM, anunció la puesta en marcha del programa “Unidos por el Agua” como una estrategia para llegar el recurso a las zonas donde había comunidades que aún no disponían del servicio a pesar de que otros sectores habían sido conectados hacía más de 50 años.
“EPM viene trabajando hace 60 años para ampliar la cobertura, con recursos, calidad y continuidad. Unidos por el Agua es una nueva etapa de este proceso que se adelanta en equipo con el Municipio y que se ejecutará en el periodo 2015-2019. EPM destinará recursos por más de $ 100.000 millones” en un plan hasta 2019 con la meta de beneficiar a 40.000 hogares.
Y no fue solo esta meta, como lo publicó en un trino el propio mandatario Gaviria en esa misma fecha (6 de agosto/2014). En dicho cuatrienio, la inversión en agua potable y saneamiento básico hecha por la alcaldía alcanzó el 3,7 % de la inversión pública, cercana a los $800.000 millones en total en favor de 100.400 viviendas con programas mejoramientos incluidos. Con el Mínimo Vital de Agua, otro programa de EPM, se beneficiaron 41.148 hogares, según la Encuesta Medellín Cómo Vamos 2015.
Más de 42.000 con Fico
Pero si los indicadores del periodo Gaviria se pueden calificar de positivos dado que Medellín se ubicó como la segunda ciudad con más inversión porcentual y percápita en agua potable y saneamiento básico, con $83.303 contra $91.708 de Bucaramanga, que ocupó ese 2015 el primer lugar, los guarismos de Federico Gutiérrez (2016-2019) no se quedan atrás.
Al final de su mandato, este alcalde logró que 40.200 familias accedieran a acueducto y alcantarillado con el programa Unidos por el Agua.
“Cuando iniciamos nuestro gobierno, 70.000 familias de la ciudad no contaban agua. Entre 2016 y 2019 logramos que más del 57 % de ellas tuvieran este servicio”, informó Gutiérrez en el libro de su balance.
Las inversiones en este periodo fueron de $250.000 millones con 6.900 viviendas que accedieron a agua potable por obras de mitigación, 14.000 de asentamientos informales quedaron con sistemas alternativos de agua potable, y 19.300 se habilitaron para conexión de servicios de acueducto y alcantarillado.
Al respecto, Piedad Patricia Restrepo, vocera de la veeduría Todos por Medellín, precisó que aunque “Medellín aún no tiene coberturas del 100% de los hogares en servicios básicos como acueducto y alcantarillado, entre 2016-2019, de acuerdo con cifras de Medellín Cómo Vamos, en acueducto la ciudad mantuvo una cobertura de 96,9% y en alcantarillado pasó de 91,6% a 95,4%. Justo en ese periodo, desde la alcaldía se tuvo la estrategia Unidos por el Agua en alianza con EPM, que se propuso llevar acueducto y alcantarillado a 40.200 hogares. Al final del periodo se logró llegar a 41.391 hogares”.
Hay dichos como aquel de que por la boca muere el pez. Para decirlo sin refrán popular, “las cifras hablan por sí solas”. Nada en Medellín empezó en 2020.
268 mil personas se beneficiaron en 2021 con el programa Mínimo Vital de Agua de EPM
CONTEXTO DE LA NOTICIA
PARA SABER MÁS
META DE QUINTERO ES 14.200 HOGARES
Según el balance de EPM del programa Conexiones por la Vida, desde 2020 a julio de 2022, en total con acueducto y alcantarillado se han beneficiado 8.374 hogares, siendo las más favorecidas las comunas de Manrique (1.871), Popular (1.066) y Doce de Octubre (633). Estos hogares se discriminan así: en la línea de abastecimiento comunitario en zonas de difícil gestión se han logrado conexiones en 3.138 hogares; y en la línea para estratos 1, 2 y 3, van 5.236 viviendas. La meta para 2023 es 14.200 hogares beneficiados. Actualmente se gestionan recursos para 4.000 casas con Minvivienda.