El lesionado fue llevado a la vecina población de Santa Bárbara. Algunas personas estarían analizando la posibilidad de desplazarse por la inseguridad.
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En la madrugada de este viernes personas armadas interceptaron en la salida de su vivienda al señor Gilberto Antonio Rivera López y a su cuñado a los dos los atacaron a tiros. El señor Rivera falleció y el acompañante quedó herido, por lo que fue trasladado a un centro de salud de la vecina población de Santa Bárbara donde es atendido.
El ataque se reportó en la vereda La Peña en la vía Abejorral -Santa Bárbara a las 5:30 de la mañana aproximadamente cuando las dos personas se disponían a salir a trabajar. La comunidad fue la que alertó sobre lo ocurrido.
“La policía se desplazó hasta el lugar referenciado y en efecto pudo constatar que había un cuerpo sin vida, la persona herida fue trasladada por parte de la comunidad hasta el municipio de Santa Bárbara. Hasta ahora no tenemos elementos suficientes de que fue una incursión armada en ese sector”, dijo el alcalde Julián Muñoz.
La policía llegó hasta el lugar de los hechos y comenzó con la recopilación de información para esclarecer el reciente ataque armado en Abejorral.
“En coordinación con el Ejército Nacional y equipo de investigación SIJIN La Ceja nos encontramos en el lugar con el fin de iniciar el esclarecimiento de los hechos”, indicó el Intendente, Asdrúbal Hincapié Loaiza, comandante de la estación de Policía Abejorral.
Desde la zona han lamentado la muerte del señor Gilberto Antonio Rivera López, quien según la comunidad era una persona muy querida en la vereda y reconocido por ser bastante colaborador, incluso, indican que durante la pandemia fue un gran apoyo para sus vecinos porque compartía alimentos con quien la estaba pasando mal.
También contaron que existe una gran preocupación por que la inseguridad ha aumentado, incluso algunas personas que, por seguridad se les omitirá su nombre, han indicado que de no solucionarse la problemática de manera urgente estarían pensando en abandonar el territorio para proteger sus vidas y las de sus hijos, los cuales en algunos momentos no envían a clases por temor.