POR EDISON FERNEY HENAO H.
Todavía avanzan los trabajos para remover los derrumbes que impiden la circulación total entre las veredas La Garrucha y Monteloro.
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Después de la emergencia registrada en la madrugada del domingo en San Luis y un tramo de la vía Medellín-Bogotá, las autoridades de ese municipio confirmaron que, aunque en este momento no se han despejado los derrumbes en su totalidad, el corredor opera a un solo carril.
Así lo detalló Hugo Serna Tabares, comandante de Bomberos San Luis, quien expresó que por el corredor ya transitan automotores, pero con precauciones y a velocidades moderadas para evitar una nueva emergencia: “Si bien el paso es restringido, para avanzar en los trabajo de remoción, se va dando vía por momentos, mediante uno de los carriles”.
Este parte lo confirmó Henry Edilson Suárez, alcalde del municipio de San Luis, al aclarar que la maquinaria del Instituto Nacional de Vías (Invías) hace presencia en el corredor para retirar, lo más rápido posible, el material desprendido. “Esperamos dar vía por los dos carriles mañana, si sale como lo esperamos”.
Cabe recordar que fueron 15 los derrumbes registrados por el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia (Dagrán) hasta ayer lunes, los cuales afectaron la movilidad de los sectores de La Garrucha, La Josefina y Monteloro (sentido Medellín-Bogotá).
Actualización de afectados
Además de la vía, las fuertes lluvias de este fin de semana dejaron un fallecido y cuatro heridos. La víctima mortal que cobró el derrumbe fue Norberto Bedoya, de 54 años, quien era conocido en la vereda La Josefina como un obrero de construcción.
El parte actualizado de los heridos, según el alcalde Suárez, corresponde a un menor de ocho años de edad, quien ya fue dado de alta; dos mujeres: una con trauma craneoencefálico y otra con afectaciones en parte de su mano derecha, las cuales fueron remitidas al hospital La María de Medellín; y un joven, quien tuvo heridas menores y es atendido en el hospital del municipio.
En cuanto a las viviendas afectadas, el comandante Serna Tabares precisó que fueron diez las casas evacuadas en las últimas horas por posibles riesgos ante una nueva emergencia. De estas, cuatro fueron desalojadas de manera definitiva (se encuentran al pie de un caño, que suele crecerse con el invierno), según el alcalde, quien contabilizó un total de 20 viviendas afectadas por los deslizamientos del domingo.
En cuanto a las recomendaciones, el mandatario local precisó que se avanza en labores pedagógicas en la zona afectada, para que los habitantes a pie de carretera y los usuarios de la vía estén atentos a novedades y puedan prevenir emergencias. “El terreno en la Medellín-Bogotá es muy inestable en época de lluvias. Todo es incierto”.
Margarita Soto Martínez, quien vive cerca de la Institución Educativa de la vereda La Josefina, le confirmó a EL COLOMBIANO que la situación en la zona de la emergencia es tranquilizadora. “Siempre hay trancones y derrumbes pequeños, pero todo está más normalizado. Aunque solo se puede usar un carril, la gente ya está menos encartada”.
Sobre las personas afectadas, la habitante de La Josefina aseveró que hubo familias a las que no les quedó nada, por lo cual reiteró que el apoyo de las autoridades locales y departamentales se brinde con la mayor brevedad posible. Confirmó, también, que persiste el temor, pues las autoridades de gestión del riesgo y atención a desastres no descartan nuevos movimientos de tierra.