A través de un comunicado, el Cabildo Indígena Arhuaco del Resguardo Kogui instó al Gobierno nacional a intervenir de manera urgente la emergencia, teniendo en cuenta que se estarían perdiendo cultivos de yuca, papa, cacao, café, entre otros.
La Sierra Nevada de Santa Marta nuevamente arde en llamas por cuenta de cinco focos de incendio que se mantienen activos, cuatro de ellos en la parte alta de la cuenca del río Fundación desde el pasado 15 de febrero de 2024, y otro más en inmediaciones al municipio de Aracataca, según advirtió el Cabildo Indígena Arhuaco del Resguardo Kogui.
En un comunicado emitido este sábado en horas de la noche, el Cabildo Indígena señaló que las llamas de cuatro de los focos de incendio están afectando a las comunidades Umake, Bunkwamake, Singuney y Windowa, ubicadas entre las veredas El Cincuenta, Galaxia y Chinchicua; mientras que la conflagración que se registra a la altura de Aracataca tiene en jaque a la comunidad de Seynurwa.
Diana Balaguera Villafañe, secretaria del pueblo arhuaco en los departamentos del Magdalena y La Guajira, indicó que aunque han hecho lo humanamente posible para lograr controlarlos, se han quedado cortos por la falta de herramientas para sofocar las llamas, las altas temperaturas y los fuertes vientos que han facilitado la propagación de las mismas.
«Cuando tratamos de atender un punto, tenemos otros puntos que se activan, entonces el llamado es primero a atender de manera inmediata esto incendios, pero también de alguna manera que nos den las herramientas o nos capaciten para poder nosotros, en primera línea, para controlar los incendios para no esperar a que se salga de nuestras manos», dijo.
Indicó, además, que la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) realizó un sobrevuelo este domingo para conocer la dimensión de las emergencias, por lo que se encuentran esperando la autorización del envío del sistema bambi bucket, teniendo en cuenta que se trataría de zonas de difícil acceso por la falta de vías.
Balaguera precisó que las zonas afectadas corresponden a bosques de conservación en los que hay cultivos de yuca, plátano, cacao, café, entre otros.