La víctima hace un llamado a las autoridades ante el aumento de la inseguridad en la ciudad.
La víctima, quien regresaba a su residencia tras asistir a una iglesia cristiana, sufrió heridas en el brazo y la parte posterior del hombro.
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Ramírez Melo aseguró que, en un principio, creyó que se trataba de la explosión de una llanta.
“Yo asisto a la iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional y venía con una compañera en la moto. Cuando llegamos al semáforo, sentí como que algo explotó y me cayó un ardor en la espalda. Le dije a mi amiga: ‘Nena, explotó algo’. Yo pensaba que era una llanta y que alguna partícula me había caído, pero me ardía mucho”, sostuvo.
Según su testimonio, un motociclista que se encontraba cerca fue quien le advirtió la gravedad del asunto.
“Cuando me levanté la blusa, un señor en otra moto me miró y me dijo: ‘Doña, usted lo que tiene ahí es una bala y tiene el hueco’. Ahí fue cuando entendí que no había sido la llanta ni otra cosa, sino que me habían dado un disparo”, dijo.
La mujer fue trasladada a un centro asistencial, donde confirmaron que el proyectil que la impactó provendría de un arma traumática.
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La señora Ramírez Melo hizo un llamado a las autoridades, denunciando la creciente inseguridad en la ciudad. “Esto es preocupante, no podemos seguir viviendo en esta situación. Imagínate, yo tan feliz que vivo en Valledupar y ahora vivir esto me parece aterrador, lo que se está viviendo en la ciudad”, dijo.
Por lo anterior, la Policía avanza en las investigaciones para esclarecer este hecho.
Fuente: Sistema Integrado de la Información