En la parroquia Santo Tomás Moro, localizada en el barrio Timiza, los ladrones corrieron una teja para poder meterse. Por más que crean en Dios, a los feligreses ya les está dando miedo ir la misa en esta iglesia en Bogotá.
TOMADO DE: noticiascaracol.com
Hace unas semanas se difundieron imágenes de un hecho insólito, el robo a dos mujeres que acudían al oratorio de una iglesia en Bogotá . Feligreses y comunidad católica ahora denuncian que la parroquia Santo Tomás Moro, localizada en el barrio Timiza, nuevamente está siendo objetivo de la misma banda.
“Momentos de susto porque llega la gente a orar acá y ese muchacho alto llega y va atracando con cuchillo. ¿Ahí qué puede hacer uno?, absolutamente nada. A la señora que estaba adelante la robaron, la que estaba atrás no traía ni plata ni celular ni nada”, recalcó una mujer que asiste frecuentemente a la eucaristía.
Esta misma creyente reveló que “ayer, cuando vinimos a la eucaristía de las 10, el padre contó que a la madrugada habían venido (los ladrones), rompieron las tejas, se metieron por ahí y se llevaron un equipo de sonido y unas cámaras”.
Otro de los fieles de esta Iglesia en Bogotá asegura que el ladrón “es un bandido que se viene metiendo a las parroquias en la localidad de Kennedy y tiene atemorizadas a las mujeres de Timiza”.
Hurto a personas en Bogotá está disparado
A propósito de inseguridad en la capital de Colombia, en más del 20% ha aumentado el hurto a personas durante el 2023. El raponazo y los robos con arma de fuego son los que más preocupan a la ciudadanía. Tener el celular en la mano en las calles se volvió una verdadera condena.
Los raponazos son quizá el tipo de hurto que más atormenta al ciudadano. Normalmente, la modalidad es en motocicleta y, generalmente, el delincuente no va solo. Es el caso de un motociclista que recientemente le cerró el paso a un ciclista para que otro lo atacara.
Además, los ladrones suelen subirse a los andenes por donde van los peatones, pero, aun sin tener un objeto de valor a la vista, muchas mujeres son víctimas del raponazo de su bolso, así que solo ir caminando ya es un riesgo latente.
«La Alcaldía y otros entes también deberían como pellizcarse un poquito, realmente uno casi no puede montar en Transmilenio”, comentó una ciudadana.
Si se compara la inseguridad en Bogotá en este momento y cómo estaba hace un año, el hurto a personas es lo más disparado.
Según cifras, entre enero y mayo del 2022 se registraron 48.056 robos, mientras que entre enero y mayo de 2023 fueron 57.788, es decir, 9.732 casos más.