Se espera que la primera turbina esté encendida a mediados del próximo año.
Presentar un panorama general de Hidroituango, los avances de las obras y las incertidumbres por el fallo de la Contraloría, fue el propósito de la reunión entre las directivas del Grupo EPM y los principales gremios de los servicios públicos como Acolgen, Asocodis, Naturgas, Asoenergía y Acodal.
Los asistentes coincidieron en que lo más importante es terminar la obra y confiaron en que la primera turbina se encenderá en 2022.
La presidente de Acolgen, Natalia Gutiérrez Jaramillo, aseguró que recibió una información completa sobre el estado de la obra y las finanzas de EPM. “Yo creo que la conclusión más grande es que este proyecto tiene que salir adelante. Tenemos que unirnos todos para acompañar a EPM, que se ha caracterizado por tener gente fantástica técnicamente. Yo creo que ese es el mensaje de hoy después de la información que recibimos”.
La directora Ejecutiva de Asoenergía, Sandra Fonseca Arenas, dijo que Hidroituango es clave para el desarrollo y la reactivación del país. “Nos permite conocer con trasparencia el proceder de EPM que viene brindando la información pertinente sobre Hidroituango y nos permite ratificar la confianza que tenemos en EPM para terminar el Proyecto por el bien del país.
El sector energético y los usuarios hemos reiterado la necesidad de que se inicie con la generación de energía en Hidroituango para mitigar los riesgos y asegurar la competitividad del país”.
El Grupo EPM avanza en tres frentes: la prórroga de los contratos con los actuales constructores, la culminación de las obras una vez finalice dicha prórroga y el Plan Mireya que consiste en garantizar la culminación de Hidroituango en caso de quedar inhabilitados los actuales constructores.