Falta de obras de infraestructura, puntos críticos y disminución de la accidentalidad, los argumentos de estas autoridades para mantener la medida en corredores donde tienen cámaras de fotodetección para sancionar la restricción.
Pese a que el objetivo de tener vías exentas del pico y placa es facilitar el tránsito de quienes están de paso por la ciudad, las alcaldías de Bello e Itagüí decidieron mantener la medida en corredores como la autopista Norte, la avenida Regional y la autopista Sur, tres vías en los que estas administraciones tienen cámaras de fotodetección. El argumento pasa por infraestructura insuficiente, baja accidentalidad y la ejecución de futuros proyectos viales.
Hay que destacar que desde el primer semestre del año pasado, la Alcaldía de Bello tomó la decisión de no implementar la exención de la medida en la autopista Norte y en la avenida Regional, todo por cuenta de las congestiones que se presentan en la glorieta de Niquía, en la cual circularían más de 20.000 vehículos provenientes del norte del Valle de Aburrá, si se levantara la restricción.
El secretario de Movilidad de Bello, Andrés Camilo Montoya, expresó que “nosotros tenemos un punto muy crítico y neurálgico en la Glorieta de Niquia porque recibimos todos los vehículos del norte del área metropolitana, del Norte de Antioquia, la Costa Atlántica, lo que era un conflicto muy grande y nos estaba arrojando muchos muertos en temas de accidentes de tránsito en este punto. Con esta medida nosotros logramos descongestionar un poco el corredor”.
El principal argumento para poder levantar la medida es que se pueda construir el intercambio vial La Seca, en sentido norte-sur, para conectar la autopista Norte con la avenida Regional desde el batallón Pedro Nel Ospina hasta la unidad deportiva Tulio Ospina, para así disminuir el porcentaje de los vehículos que ingresan a la glorieta de Niquía. Si bien hay planos, hasta el momento no hay respuesta de financiamiento por parte del Gobierno Nacional para su ejecución.
En cuanto a Itagüí, la restricción se reimplementó para el segundo semestre del año pasado con el argumento de iniciar las obras del intercambio de Fábricas Unidas, proyecto que por inconvenientes contractuales no pudo iniciar en el segundo semestre. Ahora indicaron que se tiene previsto que entre marzo y abril podría empezar su ejecución.
Pero con esta medida en esta vía tuvieron resultados que les permite sustentar su continuidad, basada principalmente en las cifras de accidentalidad y muertes en las vías de este municipio pasando de ocho en el primer semestre del año pasado contra dos en el segundo. Sebastián Zuleta Zea, secretario de Movilidad de Itagüí, señaló que “la siniestralidad más alta de nuestro municipio ocurrió precisamente en ese primer semestre, con el 40% de los hechos ocurridos en ese tramo vial de la autopista Sur. Entonces es por esto que nuestro alcalde toma la medida de nuevamente aplicar la medida de pico y placa”.
En Bello hay cámaras en ambos sentidos de la autopista Norte y en ambas direcciones de la avenida Regional, a la altura de los talleres del Metro de Medellín, mientras que en Itagüí también hay dos de estos dispositivos en la autopista Sur, uno a la altura de Ideo y la otra en las afueras del cementerio Jardines de Montesacro.
En los demás municipios del Valle de Aburrá, incluyendo a Medellín, hay libertad de circulación en las vías nacionales como la autopista Sur, la avenida Regional, la autopista Norte, la autopista Medellín-Bogotá, la variante a Caldas, la vía vieja a Caldas, la vía Las Palmas y la Loma del Escobero.
Con la medida del pico y placa, que rotará el próximo 3 de febrero, se busca que salgan de circulación 200.000 vehículos en todo el Valle de Aburrá, en una subregión que actualmente tiene 2,6 millones de automotores, entre carros y motos, situación que puede generar colapso en las vías principales, sobre todo en horas pico.