Los dos delincuentes aprovecharon el partido de la final del fútbol colombiano para cometer el hurto, pero un escolta lo evitó. “Esta cuadra es muy peligrosa”, dicen testigos.
Un escolta enfrentó a tiros a dos señalados ladrones que intentaron robarse una camioneta que estaba estacionada en una calle del barrio San Joaquín, en la localidad de Engativá, en Bogotá, durante la noche del miércoles 21 de junio. Uno de los delincuentes murió.
La balacera se desató cuando estaba terminando el encuentro entre Millonarios vs. Nacional por el título de la liga del fútbol colombiano.
Los vecinos escucharon los tiros y pensaron que se trataba de pólvora que estaban lanzando los hinchas por el partido. Cuando se asomaron por las ventanas, se dieron cuenta de que se trataba de un robo.
Los ladrones habían llegado minutos antes, armados con un revólver y una pistola, e intentaron abrir una camioneta a la fuerza. Un escolta se dio cuenta de lo que pasaba y los enfrentó.
“A la hora del partido de Millonarios se escucharon unos tiros, nos asomamos y parece que dieron de baja a un ladrón, el otro quedó con vida y parece que la Policía lo cogió”, narró Félix Lozano, testigo de lo que ocurrió.
Los señalados ladrones cayeron cerca de la camioneta. Uno de ellos murió minutos después y el otro fue trasladado por las autoridades a un centro hospitalario.
Según el señor Lozano, “esta cuadra es muy peligrosa, prácticamente hay dos muertos en menos de cuatro meses”. Por eso dice que se necesita más seguridad, aunque reconoce “que como en el cuadrante hay poquito policía disponible, pues ellos hacen lo que pueden”.