La famosa casa ubicada al frente del Parque Educativo de Abejorral, donde otrora viviera el conocido abejorraleño Hernán Ospina, parece que, al igual que muchas viviendas antiguas, no está resistiendo a los embates del tiempo y las lluvias.
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Esta vivienda, que hace parte de un casco urbano considerado por el Ministerio de Cultura como Bien de Interés Cultural de Carácter Nacional, ha mostrado notorios signos de deterioro en los últimos días, especialmente en la estructura de sus techos.
“Vamos a citar de manera extraordinaria al Comité de Gestión del Riesgo en las próximas horas porque aquí hay una gran afectación en las cubiertas de las casas patrimoniales”, dijo Julián Muñoz, alcalde de Abejorral.
Son aproximadamente 150 las viviendas que necesitan de manera imperiosa una inyección de recursos. Y es que factores como las exigencias para la intervención de inmuebles con valor patrimonial, la tramitología que esto implica, la antigüedad de las casas y, para colmo de males, la ola invernal, dejan a Abejorral con enormes retos en lo que a la conservación de sus viviendas respecta.
“Es una sumatoria de factores muy complejos. Estas casas son muy viejas; nuestro municipio va a cumplir 210 años. Ya le escribimos al Ministerio de Cultura y al parecer ellos van a citar al Consejo Nacional de Patrimonio, porque aquí se necesita una intervención urgente”, dijo el mandatario local.
Resta esperar, como es habitual en este tipo de procesos, que el Gobierno Nacional dé una luz sobre la forma en que debería abordarse esta contingencia, y procurar así que la memoria de un pueblo reconocido por su belleza no se venga al piso.