ECUADOR:
En un hecho que ha generado malestar y rechazo en el colectivo ciudadano que respaldaba la condecoración a Fernando Villavicencio, se han revelado una serie de irregularidades en el proceso que ha dejado al descubierto la falta de transparencia y respeto a los procedimientos establecidos.
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Oscar Terán, abogado y auspiciante de una de las postulaciones, expresó su preocupación por el proceso y explicó que el 9 de noviembre, se presentó la solicitud para la condecoración de Villavicencio, acompañada de 112 páginas de anexos. Sin embargo, al día siguiente, al consultar el Sistema de Trámites Municipales (SITRA), los ciudadanos constataron que, a pesar de haber registrado la solicitud, no aparecían los pasos subsecuentes, generando incertidumbre.
De manera extraoficial, se dio a conocer que existía otro postulado, perteneciente a Liga Universitaria de Quito, y que el martes de la semana pasada se conocerían las postulaciones para el Gran Collar San Francisco de Quito. La Comisión de Mesa, conformada por el Alcalde, la Vicealcaldesa y dos concejales, Cristina López y Ángel Vega, tendría la responsabilidad de evaluar las candidaturas.
Sin embargo, se descubrió que la concejal López, encargada de presentar la postulación de Villavicencio, se encontraba enferma de COVID. La Comisión de Mesa solo conoció la postulación de LDU, presentada por el concejal Michael Aulestia, dejando de lado las solicitudes del concejal Bernardo Abad y otros respaldos ciudadanos.
La noticia de la «Apertura Fase Impugnación» llegó 24 minutos antes del plazo establecido para impugnar. A pesar de la pronta reacción, el escrito de impugnación no aparece registrado en el SITRA, generando más dudas sobre la transparencia del proceso.
En la sesión del Concejo ampliado que tuvo lugar ayer,27 de noviembre, no se atendió el pedido de Bernardo Abad, y según Terán, evidenciando una serie de irregularidades, atropellos al debido proceso y un desprecio hacia el respaldo de un importante sector de ciudadanos y entidades prestigiosas, respaldado por 2 millones de quiteños.
El colectivo ciudadano, consternado por lo que consideran injusticias, critica la actitud del Alcalde, quien no aprobó ni negó la solicitud, sino que la ignoró por completo. Se califica esta actitud como cobarde y se denuncia el poder omnímodo que parece actuar de manera irresponsable e impune en este caso.
En medio de estas ilegalidades, el colectivo hace un llamado a la reflexión y acción cívica, destacando que el deber cumplido no genera satisfacción en un contexto donde el poder parece actuar de manera indiscriminada. Se plantea la posibilidad de abrir espacios para nuevos cauces políticos y se insta a los jóvenes a rescatar a Quito de la coyuntura actual, invirtiendo el sentido del mandato.
En un intento de que la presidenta de la comisión María Cristina López de respuesta a esta indignación ciudadana, La HORA le llamó y escribió, pero aún no se obtiene respuesta. (EC)