Las incesantes luchas que han librado los líderes comunales del Barrio Chino siguen sin tener soluciones reales.
Aún las aguas de la ciénaga de Las Quintas mantienen las calles inundadas por la subida de la marea y a los habitantes les toca convivir con los fuertes olores de la contaminación ambiental que existe.
Ahora, una nueva denuncia sale a flote en esta comunidad, esta vez relacionada con los canales de aguas pluviales que también están en precarias condiciones. De ellos, el más afectado es el canal Uniroyal, que empieza en la avenida Pedro de Heredia y finaliza en las aguas de la mencionada ciénaga, al otro lado de la avenida del Lago.
Son alrededor de 300 metros de extensión de esta estructura, que en varios tramos está llena de basuras y aguas putrefactas estancadas, afectando a varias familias que se resisten a ser desplazadas por el creciente comercio en la zona, y a los trabajadores y propietarios de los negocios que se han instalado en ese callejón Uniroyal.
“El canal está completamente tapado, lleno de desechos y aguas residuales. Le faltan varias placas, hay un sector del mercado de Bazurto que no tiene alcantarillado y allí algunas personas arrojan basuras y aguas contaminantes al caño. La situación es crítica porque el daño ambiental que se le causa a la ciénaga es grande”, sostuvo Donaldo Carmona, integrante de la Junta de Acción Comunal del Barrio Chino.
Hace falta compromiso
En algunos tramos del canal carentes de placas, las aguas negras salen a la calle y se estancan, convirtiéndose en charcos que se dispersan con el paso de vehículos. En ellos la fetidez es grande, por eso los vecinos mostraron su descontento con esta situación que deben soportar las 24 horas, reconociendo que aunque no es el único foco de contaminación aledaño a Bazurto, sí es uno de los más insoportables.
“Eso es todos los días, cualquiera imaginaría que uno se acostumbra a convivir con los olores y demás perjuicios, pero no es así, estas condiciones no son aptas para nuestras familias, vivir así es vivir mal”, señaló una residente que tiene más de 30 años habitando el callejón Uniroyal.
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Los afectados agregaron que al final del canal habían alrededor de siete contenedores de basuras dispuestos por la empresa Veolia para la recolección de desechos. Sin embargo, todos se fueron dañando por el mal uso que algunos trabajadores de Bazurto hacían de estos. Ahora, las basuras quedan regadas en el piso y muchas van a dar al canal, lo que aumenta su contaminación. También se refirieron a un sector de Bazurto conocido como El Salivón, que necesita con urgencia conexiones al alcantarillado.
“Necesitamos que la Alcaldía realice una jornada integral de atención en esta parte del Barrio Chino. Queremos que vengan a revisar las conexiones sanitarias de los locales comerciales ubicados desde la entrada del callejón, también que reconstruyan las placas del canal que se dañaron. Y por último, que hagan una sensibilización con los comerciantes para que tengan una mejor disposición de sus residuos, porque debe existir un mayor sentido de pertenencia con el medio ambiente”, puntualizó Donaldo.
Desde la administración distrital afirmaron que desconocían la situación en este sector, por lo que se programará para los próximos días una visita de inspección y así determinar las acciones a las que haya lugar.
