NÉSTOR CASTELLAR ACOSTA
La comunidad está indignada con las autoridades por realizar el operativo policivo sin tener en cuenta los altos índices de inseguridad a los que se enfrentan.
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Indignada, molesta y preocupada se encuentra la comunidad de la urbanización Villas de La Candelaria luego de que a primeras horas de la mañana de hoy se iniciara en firme la diligencia de desmonte de rejas y talanqueras que los vecinos habían instalado hace dos años en la mayoría de calles para protegerse de la delincuencia.
El operativo de restitución del espacio público estaba previsto para el pasado viernes 21 de julio, pero ese día no estaban dadas las garantías para desarrollarlo y fue necesario aplazarlo para este lunes 14 de agosto. La decisión de posponer también obedeció a las múltiples protestas de los residentes, quienes con palos y llantas bloquearon dos veces la carretera La Cordialidad.
Hoy, desde las 7 a. m., el barrio se llenó de policías pertenecientes a la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden – (UNDMO), conocida anteriormente como ESMAD (Escuadrón Móvil Antidisturbios), quienes se ubicaron en los puntos de acceso y esquinas para garantizar que el desmonte de las estructuras se realizara sin contratiempos.
La decisión de retirar las rejas la tomó la inspectora de Policía de la Comuna 6 B, luego de una denuncia instaurada por habitantes del conjunto vecino Portales de Alicante, quienes se quejaban por la obstrucción a la libre movilidad.
Jairo Puello, residente en Villas de La Candelaria, lamentó la decisión y pidió que a partir de ahora las autoridades refuercen la seguridad en el barrio.
“La inspectora está amparando los derechos del bandido porque ahora los delincuentes podrán entrar con facilidad para hacer sus fechorías y huir. Ella debería estar a favor de la comunidad, no de los bandidos. Este operativo es algo que no debe hacerse, sobre todo porque nosotros estábamos abriendo las rejas en el día y las dejábamos así hasta las 9 de la noche. Ahora no tenemos ningún tipo de seguridad, estamos desamparados”, señaló Puello, exigiéndole a la Policía Metropolitana de Cartagena que redoble la vigilancia en las calles con los cuadrantes.