Los denominados fitomedicamentos son de origen vegetal, elaborados bajo normas internacionales.
Investigadores de la Universidad Javeriana se encuentran en la última fase de prueba en el desarrollo de un medicamento, a partir de una planta producida en Boyacá, para disminuir los síntomas de la enfermedad covid-19. Una vez supere la etapa en la que participan cien pacientes, se iniciará la producción farmacéutica en el país.
Desde 2002 Susana Fiorentino, doctora en Inmunología, ha desarrollado un trabajo científico alrededor de la búsqueda de medicamentos contra enfermedades como el cáncer y aquellas que tienen un componente inmunológico.
Se trata, advierte Fiorentino, de un extracto que se ha “convertido en fitomedicamento y para el cual estamos en las última fases de desarrollo se denomina P2ET y es un extracto obtenido del Dividivi, que es la Caesalpinia espinosa, una planta que crece en el Alto Ricaurte, en Boyacá”.
El trabajo de investigación, los científicos aseguran “puede aportar en la mejora de la sintomatología de los pacientes con enfermedad respiratoria, que en este caso es inducida por la infección con SARS-Cov-2 generando la covid-19”.
En comparación con las evidencias presentadas sobre la posibilidad de la reducción de la carga viral que otras sustancias, hoy consideradas por la Organización Mundial de la Salud como inocuas ante el coronavirus, los fitomedicamentos obtenidos por los científicos de la Universidad Javeriana actúan directamente en la respuesta inmune de los pulmones.
“Principalmente la sintomatología de la covid-19, no está directamente relacionada con la carga viral al parecer el virus infecta y posteriormente es la ‘disregulación’ de la respuesta inmune lo que genera la sintomatología que puede llevar a algunos pacientes a la muerte”, agrega la doctora en Inmunología.
De interés: Alistan otros fármacos para investigaciones contra la covid-19
Con el apoyo y participación de la Universidad Javeriana y del Hospital San Ignacio, en Bogotá, se desarrolla actualmente un estudio con 100 pacientes con el objetivo de obtener la evidencia científica que se necesita para la aceptación del fitomedicamento en el tratamiento contra la covid-19.
“Los pacientes estarán seguidos muy de cerca, por el equipo clínico, para determinar en qué momento el medicamento puede realmente tener una actividad y puede mejorar o no, indudablemente el paciente puede seguir igual, eso hace parte del estudio y de su hipótesis, después del consumo del medicamento durante 14 días que es lo que tenemos estipulado”, puntualiza Fiorentino.
Una vez termine la fase de estudio con los pacientes, se iniciará el desarrollo farmacéutico del fitomedicamento para reducir los síntomas y efectos de la covid-19 que se espera esté en el mercado nacional en 2021.
RCN Radio
