POR: NELSON MATTA COLORADO |
Un tecnólogo en Salud Ocupacional, de 34 años, fue capturado por la Policía luego de protagonizar un aberrante hecho de exhibicionismo en el metro de Medellín, cuando al parecer aprovechó el descuido de una pasajera para frotarle sus genitales.
El caso, ampliamente difundido por la prensa y las redes sociales en su momento, se conoció el pasado 20 enero. Sucedió dentro de un vagón, a las 8:00 a.m. de ese día, cuando una mujer de 41 años viajaba de pie por la Línea A.
Otro pasajero grabó con su celular el instante en el que el sospechoso se le arrimó por la espalda, extrajo su miembro y lo recostó contra ella, quien no se percató de lo ocurrido.
En una entrevista con EL COLOMBIANO, la afectada explicó que “en el metro es normal que uno esté junto a muchas personas, pasa todo el tiempo”. “Yo sí sentí al hombre junto de mí y su mirada, me miraba mucho, pero no pensé nada. Incluso me corrí varias veces y él siempre aparecía al lado, pero eso puede ser normal. Pero al ver el video quedé, como se dice, consternada”, dijo a este medio.
Ella se dio cuenta horas más tarde, cuando ya estaba en su oficina y la hija de su jefe le mostró el video, ya viralizado por la web, en el que se reconoció por la vestimenta, pues su rostro no era visible en la grabación.
El mismo día de los hechos hubo una reacción de la Policía, que gracias a las cámaras de vigilancia e información ciudadana ubicó al abusador y lo condujo a una estación, para tomarle los datos de identidad. En ese momento, sin la denuncia en la mano, no pudieron arrestarlo.
Sin embargo, la Sijín comenzó el proceso de investigación, recopiló la evidencia y la Fiscalía solicitó una orden de captura por el delito de acto sexual abusivo con incapaz de resistir, la cual se materializó este jueves 3 de febrero en una vivienda del barrio Pedregal, de Medellín, según el general Javier Martín, comandante de la Policía Metropolitana.
De acuerdo con el Código Penal colombiano, el cargo por el cual fue judicializado este hombre contempla penas de 12 a 20 años de prisión. Sin embargo, la dosificación puede variar si acepta su responsabilidad y hace preacuerdos con la justicia.
La víctima, quien formuló la denuncia oficial en contra del agresor, señaló en su momento que tras lo sucedido quedó en shock. “Siento miedo y no sé cómo me voy a subir al transporte público”, relató.
A pesar de las investigaciones de la Policía y la exposición de la Fiscalía en la audiencia de control de garantías, el juzgado 25 penal municipal le otorgó la libertad al procesado. Pues no es peligroso para la sociedad. De acuerdo con fuentes judiciales, el juez argumentó que el incidente no se trataba de un acto sexual con persona incapaz de resistir, sino de un caso de acoso sexual cuya tipicidad es diferente en el código penal colombiano.
Lo que sigue es que el imputado continuará el proceso en libertad, mientras la Fiscalía formula la acusación. De momento, el hombre (quien no aceptó el cargo), se presume inocente legalmente.