POR DANIELA OSORIO ZULUAGA
Ahora, cuando la mayor parte del país está en aislamiento, las miradas se dirigen al campo a fin de garantizar que quienes laboran en la siembra y cultivo de alimentos tengan también la debida protección para su salud y eviten que un posible contagio por coronavirus deje sin su despensa natural a la población del departamento.
Por ello, la Secretaría de Agricultura de Antioquia emitió una circular, dirigida a las administraciones municipales para que tomen las medidas que permitan el cuidado integral de los trabajadores del campo.
Una buena parte de los alimentos que se necesitan dependen de lo que se produce en este territorio. La Central Mayorista de Antioquia, principal centro de abastos del noroccidente del país, recibe cada mes 95.040 toneladas de alimentos provenientes de los 125 municipios del departamento, para un total del 36 % de todos los alimentos que son recibidos y distribuidos desde la Central. El 64 % restante es traído desde otras regiones e importado de países como Chile, Argentina y China. Teniendo en cuenta esas cifras, “en esta cuarentena el gobierno de Antioquia tiene un especial interés en la salud de los trabajadores del sector agropecuario”, dijo el secretario de agricultura y presidente de la Mesa Departamental de Coordinación para el Abastecimiento y la Seguridad Alimentaria, Rodolfo Correa, mientras explicaba el nuevo protocolo de salubridad y bioseguridad que empezará a regir para los trabajadores de este sector.
Cabe recordar que el 72,4 % del territorio agropecuario paisa está dedicado al sector pecuario, equivalente a 2,9 millones de hectáreas, y otro 15,5 % a labores agrícolas con 624.744 hectáreas sembradas, según la Encuesta Nacional Agropecuaria del Dane (2017). Así, se convierte en el segundo departamento con mayor proporción de producción agrícola aportando un 9,2% del total del país, de acuerdo al Censo Agropecuario del Dane.
Proteger a los campesinos
La circular de la Secretaría va dirigida a los alcaldes y secretarios de Agricultura municipales y pretende proteger desde la fuente todo el personal que permite que se cumpla la cadena de los alimentos desde la producción hasta los centros de abastecimientos y, finalmente, las mesas de los colombianos. Por eso el primer llamado es para los transportadores, los que ingresan a las fincas no deben bajarse del camión y se debe realizar una desinfección del vehículo cuando llegan a cada territorio para cargar y descargar.
Así mismo, en un listado de 15 acciones preventivas, la secretaría reitera en las recomendaciones generales acerca del uso de guantes y tapabocas en los lugares de trabajo y en las distancias mínimas de dos metros entre trabajadores.
No utilizar comedores, cuartos de aseo y demás instalaciones de forma simultánea y emplear grupos de trabajo evitando el intercambio de personal humano y material técnico entre las diferentes cuadrillas establecidas, son algunos de los requerimientos para garantizar la salud.
Por último, recomendó usar hipoclorito de sodio para desinfección de áreas de trabajo, que deben ser rigurosas cada jornada, diluyendo de 10 a 20 mililitros en diez litros de agua. “Cuidarnos es responsabilidad de todos, entre todos podemos vencer el coronavirus”, concluyó Correa .
CONTEXTO DE LA NOTICIA
PARA SABER MÁS
UNA OPORTUNIDAD PARA EL AGRO
Néstor Julián Restrepo Echavarría, doctor en Política, Comunicación y Cultura de la Universidad Complutense de Madrid (España) y coordinador de la maestría en Comunicación Política de Eafit, opinó que la actual crisis obligará a cambiar el rumbo del Plan de Desarrollo 2020-2023, sobre todo en sus componentes económico y sectores priorizados. “Tendrá que tener soluciones de un estado de bienestar, así suene populista, porque el coronavirus nos montará en lógicas de soluciones sociales y de salud. También hay una oportunidad para la agricultura y los campesinos. No podrá ser un plan de visión de siglo XXI o de grandes infraestructuras”, opinó Restrepo.