El Área Metropolitana y el Distrito alistan convenio por más de $30.000 millones para diseños.
JACOBO BETANCUR PELÁEZ |
Pese a que en la planeación de la ciudad hay consenso sobre la urgencia de que opere un ferrocarril que sirva de soporte a la congestionada Línea A, la Alcaldía de Medellín sigue con la idea de avanzar en la construcción de cinco cables aéreos para el sistema metro.
Esa línea que aliviaría el tráfico de todo el sistema ya está estructurada y se conoce como Tren del Río, con una primera fase entre Aguacatala y Barbosa que valdría más de $4 billones. Falta el cierre financiero del aporte de la región para que el proyecto se radique ante la Nación.
Pese a ello, durante un consejo de gobierno realizado esta semana, el alcalde Daniel Quintero aseguró que el proyecto que tiene la bendición del Gobierno Nacional y espera recursos que oscilan entre $3,5 y $4 billones es el de los metrocables.
Incluso, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá (Amva) y el Distrito ya están en la recta final de un convenio en el que se le inyectarán entre $30.000 y $37.000 millones para los estudios y diseños de esos futuros cables.
Desde inicios de julio pasado, cuando Quintero vio levantada la suspensión de su cargo y lanzó la iniciativa como uno de sus programas banderas, varios expertos en movilidad han cuestionado que la misma no se haya formulado desde el comienzo con base en el Plan Maestro del Metro.
“Si usted vive en Santa Cruz, Manrique, Popular, Aranjuez usted va a ser beneficiado. Si vive en Robledo, en Aures, va a ser beneficiado. Si vive en El Poblado o trabaja en El Poblado, ahí vamos a tener una especie de minitrén que va a ir desde la estación Poblado, va a subir por Los Parra hasta Aguas Vivas, allá arriba, en Las Palmas”, expresó el mandatario el pasado lunes, aludiendo a los trazados generales y tecnologías que ya están previstos para esos corredores.
Frente a los trazados, por ejemplo, aludió a una línea hacia el corregimiento de San Antonio de Prado, dos en la comuna nororiental, una hacia la comuna de Robledo y otra desde la estación Poblado del Metro hasta el sector de Aguas Vivas, en Las Palmas.
Dudas persisten
Andrés Emiro Díez, experto en movilidad y docente investigador de la Universidad Pontificia Bolivariana, advirtió que si bien algunos de los trazados generales expresados por el alcalde coinciden con algunos corredores que aparecen en ese plan, aún es muy pronto para hablar de la tecnología.
Así mismo, recordó que a raíz del incremento de la demanda sobre la Línea A, que es la columna vertebral de todo el sistema, la prioridad es el corredor del tren del río, cuya construcción permitiría al sistema aliviar la presión del metro pesado y soportar la expansión futura.
“Si seguimos metiéndole gente a la Línea A, sin el tren del río, tenemos un problema de planeación integral. Estos proyectos tienen que enmarcarse dentro de una lógica de malla de movilidad, de un sistema integrado, y no tratarse como cinco cables aislados”, expresó Díez.
Según expresó el académico, si bien la utilidad de muchos de los corredores propuestos es clara y puede contribuir a que muchas zonas de la ciudad puedan integrarse directamente al sistema, atender la planificación es crucial.
“Si yo quiero seguir llevando gente al corredor central, entonces debo fortalecer la columna vertebral, si no quiero que el sistema se me colapse o se me encorve. Es decir, si la columna no es capaz de soportar todo esos miembros, entonces va a tener problemas”, ejemplificó el profesor.
El programa anunciado
María Camila Salcedo Soto, subdirectora de proyectos del Amva, contó que el convenio anunciado por el alcalde consiste en que tanto esa entidad como el Distrito financiarán los diseños de los cinco cables prometidos. “En este momento estamos revisando cuál es la mejor forma o vinculación jurídica para poder entregar esos recursos”, expresó la funcionaria, aclarando que aún no se ha acordado el cronograma y la forma cómo se entregarán los recursos.
Por ahora, agregó, lo más probable es que el Metro sea la entidad que encabece esa labor, sobre todo por ser el operador del sistema masivo, tener los datos de flujo y movimiento de las personas y el conocimiento de la operación de los metrocables existentes.
Pese a lo afirmado por el alcalde, que presentó los trazados y las tecnologías como decisiones prácticamente tomadas, la funcionaria agregó que esas variables dependerán de la información que arrojen los estudios.
En una especie de punto medio, Salcedo señaló que esa entidad tomará como referencia los trazados generales expresados por el alcalde para profundizar en los diseños que se contratarán.
“Con el Metro vamos a hacer todos los estudios y diseños, para saber cómo van a ser las condiciones de cada una de las líneas. Tenemos que hacer un estudio previo de factibilidad, de viabilidad técnica, de definir si esas lineas que hoy se tienen planteadas son realmente las adecuadas”, dijo.
Este diario se puso en contacto con el Metro para conocer sobre su papel en ese proyecto, sin embargo, la entidad no se abstuvo de pronunciarse y señaló estar a la espera de una reunión con la Alcaldía en la que se afinarían detalles.
