Laura Melissa Sampedro
Seis personas fueron capturadas por mezclar carne de buena calidad con productos cárnicos en mal estado.
La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá desmanteló una red delictiva que se dedicaba a la comercialización de carne en descomposición en los municipios de Medellín, Bello y Copacabana. Este grupo mezclaba carne de buena calidad con productos cárnicos en estado de descomposición.
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Las autoridades informaron que las operaciones de esta red se centraban en Copacabana, donde usaban un establecimiento llamado “La Fama” como fachada para ocultar sus actividades ilícitas desde el 2022.
El local operaba como distribuidora de productos cárnicos hacia otros establecimientos. En la parte trasera del local, las autoridades descubrieron un matadero clandestino donde procesaban carne de res, cerdo, caballo y hasta de mula en condiciones insalubres.
Según la investigación de las autoridades, los integrantes de la red conseguían animales en estado crítico o fallecidos a través de contactos con fincas en el área metropolitana, comprándolos para luego mezclar su carne con productos en buen estado y venderlos en diferentes carnicerías del Valle de Aburrá.
El comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, William Castaño Ramos, explicó: “Lo que tenían pactado con las personas de fincas de los alrededores, es que si el animalito, cerdo, res o caballo o mula, estaba ya a punto de fallecer o había fallecido, ellos compraban esos animales para después sacrificarlos y comercializar su carne”.
Las autoridades estiman que esta red generaba cerca de 200 millones de pesos mensuales con la venta de carne adulterada y hacen un llamado a la ciudadanía para realizar compras de productos alimenticios en almacenes de cadena fiables.
Capturas
Durante el operativo, la Policía incautó cerca de tres toneladas de carne, dos armas de fuego y productos químicos que los delincuentes usaban para intentar extender la vida útil de la carne en descomposición.
Además, seis integrantes de la red fueron arrestados, entre ellos un menor de edad que fue sorprendido portando armas mientras se transportaba en un camión donde distribuían los productos. Los detenidos enfrentan cargos por concierto para delinquir agravado, corrupción de alimentos y maltrato animal.