La noche del 25 de junio, en Venecia, municipio del suroeste antioqueño, se convirtió en escenario de una tragedia cuando una avalancha arrasó con varias viviendas.
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Este desastre, provocado por el colapso de la ladera de las montañas tras intensas lluvias, dejó a muchas familias sin hogar, inmersas en el dolor y la desesperación.
La comunidad afectada recibió una respuesta inmediata y solidaria por parte del Ejército Nacional, que, en coordinación con el Banco de Alimentos y la Central Minorista de Medellín, recolectó ayudas humanitarias para los damnificados.
Soldados del Batallón de Infantería N.°11 Cacique Nutibara, el Batallón de Ingenieros de Atención y Prevención de Desastres N.°81, el programa Fe en Colombia y el Batallón de Apoyo de Acción Integral y Desarrollo N.°7, en una labor maratónica, se unieron a esta causa.
La avalancha se produjo alrededor de las 9:30 de la noche, cuando un derrumbe obstruyó la quebrada La Tigra. El torrente de lodo y escombros, alimentado por la incesante lluvia, devastó todo a su paso. Las verdes montañas, antes hogar de vida silvestre, ahora eran un desolado paisaje de destrucción.
La intervención del Ejército Nacional fue crucial para brindar un poco de alivio en medio de la crisis. Con el apoyo de aliados estratégicos, se recolectaron más de 60 mercados y prendas de vestir. Estos suministros fueron llevados a Venecia en los días posteriores a la tragedia, brindando no solo ayuda material, sino también un mensaje de esperanza y solidaridad.
