Los propietarios de Kampala decidieron hacer un plantón porque, a pesar de que abandonaron sus casas, las siguen pagando.
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En el 2019 los habitantes del edificio Kampala en el barrio Robledo, occidente de Medellín, fueron desalojados de sus casas por fallas estructurales.
A dos años los propietarios argumentan que los dejaron solos, porque ni la Personería de Medellín, ni la Alcaldía de Medellín y mucho menos el constructor, les han dado respuesta y las cuotas de la casa y los impuestos siguen llegando. Los cálculos de este edificio fueron realizados por Jorge Aristizábal, mismo calculista de Space.
Didier Moreno, abogado y propietario de una vivienda de Kampala, señala que decidieron hacer un plantón porque por las vías de derecho poco o nada han logrado.
«Fuimos evacuados por parte del Dagrd sin ningún tipo de planeación y de información previa, sólo se nos dijo que debíamos evacuar el edificio con niños, adultos mayores -pues el 60% de los habitantes son adultos mayores pensionados-. Desde esa fecha hasta hoy no ha habido ningún tipo de ayuda del Estado y la constructora. Los señores Luis López, Camilo Jaramillo y Ángela María Pérez, de Asfalto y Hormigón y Conproyectos nos han dilatado», argumentó el ciudadano.
En estos dos años sin habitar en sus viviendas las 72 familias han vivido un verdadero drama, porque en el edificio residían adultos mayores y niños, que tuvieron que irse para otros lugares y dejar las casas en donde muchos, invirtieron su patrimonio, los ahorritos de toda la vida.
Entre las víctimas del desalojo está David López, médico intensivista. El doctor señala que el 2020 y el 2021 ha sido un tiempo para luchar contra la pandemia por el COVID-19, pero también contra la falta de respuesta y soluciones a su apartamento en Kampala.
Hemos obrado de buena fe, confiando en la buena voluntad de que nos van a resolver el problema, pero ya nos cansamos y son 72 familias con sus dramas individuales. Yo tengo a mis viejos viviendo exiliados en donde tengo la oportunidad de tenerlos. Hay familias que todavía están pagando el apartamento que no pueden habitar», afirmó el médico.
Los 72 habitantes de Kampala señalan que como el edificio se puede repotenciar, están esperando que comiencen a hacerlo o que al menos les congelen las cuotas y los impuestos, porque como decían sus voces de protesta «quieren volver a sus casas».
