Los minutos previos a su intervención se volvieron virales en las redes sociales debido a la falta de atención de sus homólogos y delegados internacionales.
En un episodio inusual en la Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente de la República, Gustavo Petro, enfrentó una audiencia dispersa y desatenta durante su discurso el martes.
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A pesar de sus importantes palabras, los minutos previos a su intervención se volvieron virales en las redes sociales debido a la falta de atención de sus homólogos y delegados internacionales.
El presidente Petro tomó la palabra después de un receso de cinco minutos que se concedió tras el discurso del presidente de Estados Unidos, Joe Biden. Durante este tiempo, los delegados y mandatarios presentes en la Asamblea General parecían más interesados en conversar entre ellos que en escuchar al líder colombiano.
Dennis Francis, presidente de la Asamblea General, intentó en vano restaurar el orden en la sala. “La reunión se reanuda”, anunció, sin obtener respuesta. Finalmente, tuvo que golpear el mazo para atraer la atención de los asistentes
“Fue un episodio excepcional. La reunión se reanuda, y la Asamblea va a escuchar un discurso de su excelencia Gustavo Petro Urrego, presidente de la República de Colombia. Pido a protocolo que escolte a su excelencia”, instó Francis.
A pesar de los llamados de atención, la mayoría de los presentes continuaron en conversaciones o fuera de sus asientos. Fue necesario un segundo intento de Francis para finalmente dar inicio al discurso de Petro. “De parte de la Asamblea General, tengo el honor de darle la bienvenida a su excelencia Gustavo Petro Urrego, presidente de la República de Colombia, e invitarlo a dirigirse a la asamblea”, declaró Francis, pero la falta de atención persistía.
Gustavo Petro se mostraba visiblemente incómodo e impaciente, golpeando su pupitre mientras esperaba en silencio. Francis nuevamente tuvo que golpear el mazo para solicitar el silencio de los asistentes.
El presidente colombiano, visiblemente molesto por la situación, se pasó la mano por el rostro antes de finalmente dirigirse al público. A pesar de los esfuerzos por llamar la atención de la audiencia, la sala seguía sumida en el caos.
“Esto es extraordinario”, repetía Francis en dos ocasiones mientras volvía a golpear el mazo para intentar restablecer el orden. Viendo que sus solicitudes no tenían éxito, el presidente de la Asamblea General decidió hacer un último esfuerzo por presentar al mandatario colombiano.
“Excelencias, damas y caballeros. ¿Le puedo pedir a la asamblea que se organice para recibir la declaración de su excelencia, Gustavo Petro Urrego, presidente de la República de Colombia? Gracias”, rogó Francis.
Después de casi cinco minutos de desorden y ruido, el presidente colombiano finalmente pudo dirigirse a la audiencia, sin embargo, el incidente previo sin duda dejó una impresión duradera en la Asamblea General de la ONU. La falta de atención hacia un líder mundial en un foro tan importante plantea preguntas sobre la diplomacia y el respeto en el escenario internacional.