El padrastro de la menor fue capturado por tráfico de estupefacientes.
Bogotá D.C
La Policía de Infancia y Adolescencia de Bogotá encontró a una bebe de un año en un lugar que servía como ‘pagadiario’ y a la vez era utilizado para expender drogas ilícitas, en el barrio San Bernardo, en el centro de Bogotá.
Fue gracias a las denuncias de la ciudadanía que las autoridades rescataron a la menor que se encontraba junto con su madre en un habitación donde se escondían cientos de estupefacientes.
“La recuperación y restitución de derechos de esta menor de edad también estuvo acompañada de la captura de su padrastro, quien era el encargado de la venta de los estupefacientes en presencia de esta menor de edad, poniéndola en riesgo extremo”, indicó el secretario de Seguridad de Bogotá, César Restrepo.
Cuando las autoridades ingresaron al edificio, el padre adoptivo de la niña intentó escapar, según el informe de la Policía. El sujeto guardaba una caleta de estupefacientes listos para ser distribuidos, por lo que fue capturado por tráfico de estupefacientes y quedó a disposición de las autoridades judiciales.
En la habitación se encontró más de 300 dosis de bazuco, material para más de 100 dosis de cocaína, 30 cigarrillos de marihuana y dinero en efectivo producto de la venta de estupefacientes en el sector.
