Con videos, comerciantes buscan demostrar que ellos solo los retuvieron, pero que fueron hombres armados los que se los llevaron. Hasta la ONU condena lo ocurrido.
Un video muestra cuando un niño de 12 años y un joven de 18 fueron retenidos tras ser sorprendidos cometiendo un robo en un almacén del municipio de Tibú, en Norte de Santander, y a los que sujetos en moto se llevaron a la fuerza para asesinarlos.
Antes del homicidio, un comerciante les dijo a los señalados ladrones: «Lamentable son muchachos muy jovencitos, no queremos verlos mañana por allá tirados en alguna orilla de las carreteras».
Sus palabras parecieron advertir lo que pasaría después en Tibú.
El coronel Carlos Martínez, comandante de la Policía de Norte de Santander, informó que antes de que arribaran las autoridades para aprehender a los jóvenes, al sitio “llegan unos sujetos armados en motocicleta, quienes se llevan estas personas y los asesinan en las afueras del municipio”.
El oficial también dijo que el niño y el joven “fueron retenidos por los comerciantes y la comunidad por esta situación, fueron golpeados”, versión que negaron quienes los sorprendieron robando.
“Ninguno de los comerciantes ni la comunidad golpeamos a esos muchachos ni los maltratamos, ni mucho menos yo, que era el que estaba resguardando la vida de ellos”, sostuvo uno de ellos en un video que circuló en redes sociales.
Los jóvenes asesinados en Tibú al parecer eran de nacionalidad venezolana.
Se cree que el crimen habría sido cometido por disidentes de las FARC.
