El Observatorio ambiental pide revisar la salud de las especies antes de que sea tarde
La caída de árboles en Medellín durante los primeros meses de 2025 ha generado una creciente preocupación por la seguridad ciudadana. Con un saldo de una persona fallecida y once más lesionadas, la Personería Distrital ha emitido una advertencia contundente sobre la necesidad de reforzar las estrategias de monitoreo y manejo del arbolado urbano. Según el ente de control, la ciudad carece de datos actualizados y diagnósticos técnicos que permitan prevenir nuevas tragedias.
En respuesta a los más de 300 árboles derribados por las intensas lluvias y fuertes vientos, la Alcaldía ordenó la tala inmediata de 40 ejemplares que representan un riesgo inminente. Además, se ha identificado un total de 510 árboles adicionales que requieren intervención prioritaria.Estas acciones buscan reducir los peligros que amenazan tanto a peatones como a la infraestructura pública y privada en distintos sectores de Medellín.
Por su parte, el Observatorio de Medio Ambiente y Hábitat denunció retrasos en las talas autorizadas y una planificación deficiente en el manejo de estas especies. También advirtió que el sistema actual de información sobre arbolado es insuficiente para detectar afecciones internas que podrían debilitar la estructura de los árboles.
Ante este panorama, la entidad instó a las autoridades a realizar estudios fitosanitarios especializados para evaluar la salud del arbolado y tomar decisiones más acertadas para preservar la vida y el entorno urbano.