FOTO: MANUEL SALDARRIAGA Y CORTESÍA
Este joven, de 17 años, fue el que salió a la vía principal e interceptó una tractomula para informar sobre lo que había ocurrido en el accidente que dejó a 16 de sus compañeros muertos.
La tragedia del bus de servicios especiales que transportaba una excursión de estudiantes del Liceo Antioqueño, de Bello, tuvo su “niño ángel”, que fue quien salió como pudo desde un abismo de 40 metros de profundidad y llegó hasta la vía principal para parar un tractocamión y pedirle ayuda para informar sobre lo que había ocurrido.
¿Quién es David Rúa Vallejo y cómo ayudó a las víctimas del accidente del bus en Remedios?
Se trata de David Rúa Vallejo, un joven de 17 años que iba en este paseo con sus mejores amigos. Estaba ubicado en los asientos delanteros de este vehículo de la empresa Precoltur, que venía de Tolú, Sucre, hacia Bello, cuando terminó en el abismo del Punto de Referencia (PR) 12 de la vía Remedios-Zaragoza, a la altura del sector Belén, de Remedios.
Uno de los familiares de los jóvenes, consultado por EL COLOMBIANO, relató que David, junto con su hijo, lograron reaccionar cuando el bus se fue al abismo, pero fue este adolescente quien logró escalar la montaña con las fuerzas que tenía su cuerpo y parar al primer vehículo que logró ver en medio de la oscuridad.
“Rúa fue quien paró el camión y le dijo al conductor que le prestara el celular para mandarle un mensaje a su mamá a decirle que el bus se había accidentado. Al momento la mamá envió un mensaje al grupo diciendo lo que había pasado, porque ya estabamos preocupados porque el bus no daba señales. Solo teníamos que estaba parado en Remedios, pero nadie nos daba respuesta”, relató la madre de familia.
Mientras le decía al conductor lo ocurrido, también alcanzó a informar sobre lo que había pasado con varios de sus compañeros, tanto los que estaban bien como los que habían fallecido, informaron.
Después de que Rúa Vallejo logró establecer comunicación, los parientes se contactaron con los organismos de socorro, que llegaron hasta este barranco para rescatar a los jóvenes lesionados, al tiempo que los agentes de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Antioquia acudieron para hacer la inspección a los cadáveres de los 17 fallecidos, 16 estudiantes y el conductor del bus.
“Para todos nosotros Rúa es un héroe porque logró escalar todo ese lugar y pedir la ayuda. Gracias a lo que él hizo nos pudimos enterar, porque la empresa que organizó el viaje nos decía todo el tiempo que no había pasado nada, que todo estaba bien”, señaló la madre de familia.
Rúa, al igual que 16 estudiantes y el conductor suplente del bus fueron trasladados al Hospital San Vicente de Paúl, de Remedios. Este joven sufrió algunos raspones y un golpe en el tórax que no le comprometió ningún hueso. Fue dado de alta en el mismo centro asistencial de este municipio del Nordeste antioqueño.
Este joven, al igual que la mayoría de sus amigos, con los que compartió el viaje, sufrieron lesiones menores, y excepto uno de ellos, todos fueron dados de alta. Sin embargo, el restante perdió la vida en el lugar del accidente: Daniel Arismendy Fernández.
“Todos ellos se ubicaron adelante del bus, como en el cuarto, quinto asiento, y eso ayudó a que no les fuera tan mal en el accidente. La mayoría de los fallecidos estaban en los puestos de atrás de este vehículo”, comentó la madre de familia.
Los cuatro menores que fueron dados de alta en el hospital de Remedios ya se encuentran en sus casas con el acompañamiento de sus familiares, tratando de pasar el mal rato. Aunque en la memoria, Rúa quedará en el recuerdo de las familias de esta excursión del Liceo Antioqueño, de Bello, como el “niño ángel de Remedios”.
